ALMERÍA, 2 Abr. (EUROPA PRESS) -
La Audiencia Provincial de Almería ha condenado a una red integrada por siete personas que, en octubre de 2009, alijó más de 1.800 kilos de hachís en la costa del barrio de Castell de Rey si bien la operación pudo ser abortada por la Guardia Civil.
El cabecilla del grupo se dedicaba, asimismo, a proporcionar droga a otros distribuidores y aceptó el encargo para enviar a Valencia 28 kilos de esta sustancia estupefaciente, hecho por los que la Sección Tercera ha condenado a otras tres personas.
La sentencia, dictada con la conformidad de las partes, recoge que concurre la circunstancia atenuante muy cualificada de dilaciones indebidas, por lo que las penas impuestas oscilan entre los dos años y los nueve meses de prisión, y los 22 meses de cárcel.
Además, el tribunal acordó en el fallo, al que tuvo acceso Europa Press, conceder la suspensión provisional de la pena por un periodo de tres años a todos los acusados, a excepción del presunto cabecilla de la red, M.C.M.F.
Según los hechos reconocidos por las partes, M.C.M.F., T.B.B., M.M., J.R.Y., F.J.A.P., A.H., y R.P.S. se pusieron de acuerdo para introducir en España un importante cantidad de hachís procedente de Marruecos y decidieron ejecutar el alijo el 21 de octubre de 2009, eligiendo como punto de arribada la costa de la urbanización de Castell de Rey.
En los días previos al desembarco, M.C.M.F. y M.M. fueron los encargados de dotar del necesario apoyo logístico "para llevar a buen término" la operación mientras que T.B.B. y F.J.A.P. fueron los responsables de inspeccionar la zona en la que se iba a producir el desembarco para "alertar sobre posibles inconvenientes".
El 21 de octubre de 2009, los siete implicados se situaron en el punto previamente elegido para desarrollar las distintas funciones de vigilancia, descarga, y posterior trasladado a una 'guardería'.
Así, M.M. se situó en las proximidades de la costa junto a otras personas no identificadas para llevar a cabo el alijo de la droga mientras que el resto se colocó en los alrededores, controlando la zona en labores de vigilancia.
A las 02,50 horas, una embarcación semirrígida tocó tierra en Castell del Rey aunque la intervención de la Guardia Civil provocó la huida de los acusados si bien sí pudo ser aprehendida la sustancia estupefaciente y detenidos poco después R.P.S. y A.H., con las ropas mojadas y restos de arena.
En total, se decomisaron 63 fardos de hachís con un peso de 1.842.344 gramos y valorada en más de 2,5 millones de euros ya que el porcentaje de THC oscilaba entre el 3,36 y el 11,50 por ciento.
TRANSPORTE DE 28 KILOS A VALENCIA
Por otro lado, la sentencia recoge como probado que, en enero de 2010, el acusado L.M.M., residente en Valencia, contactó con M.C.M.F. "para que este le proporcionase cierta cantidad de hachís que pensaba destinar a la venta, solicitando de forma expresa que fuera de la 'M', haciendo referencia a algún lote de hachís identificado con esta letra por el traficante".
Este último acepto el encargo y, para proveerse de la cantidad solicitada, contactó a su vez con F.V.M.C. Posteriormente, M.C.M.F. y el procesado F.A.G.V. viajaron hasta Motril (Granada) con el fin de recibir de F.V.M.C. la droga y transportarla hasta Almería.
Una vez dado este paso, llamaron a L.M.M. para informarle de que ya podía desplazarse desde Valencia a Almería a recoger su encargo, por lo que el 12 de enero así lo hizo.
Los cuatro acusados cargaron una bolsa con 30 paquetes de hachís, y un peso de 28.880 gramos, en el maletero de un coche propiedad de M.C.M.F. y que iba a ser conducido por F.A.G.B. En labores de seguridad, por delante, viajaban en otro turismo L.M.M. y el cabecilla de la red de tráfico de hachís.
El primer vehículo fue interceptado por la Guardia Civil en la salida hacía Campohermoso, en Níjar (Almería), de la Autovía del Mediterráneo (A-7) aunque F.A.G.B. intentó deshacerse de los paquetes que contenía la bolsa y con un valor estimado de 42.000 euros ya que tenían un porcentaje de THC del 8,25 por ciento.
Los condenados tendrán que hacer frente a multas que van desde los 1,5 millones de euros para los participantes en el alijo a los 21.000 euros de los implicados en el transporte de droga a Valencia. La Audiencia Provincial también condena al padre de uno de los procesados a nueve meses de prisión ya que en el registro domiciliario le hallaron más de medio kilo de hachís y 0,82 gramos de cocaína.
