CÁDIZ, 26 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Sindicato Estatal de Buceo (SEB) ha informado de que la próxima semana tienen previsto reunirse todos los sindicatos del sector para analizar las medidas a adoptar de cara a plantear una ofensiva tras el accidente laboral que costó la vida el pasado martes a un profesional en Los Barrios (Cádiz), convirtiéndose en el quinto siniestro laboral mortal en lo que va de año en este campo de actividad.
En declaraciones a Europa Press, desde el SEB han calificado de "esperpéntica" la cifra de siniestralidad, resaltando que este sector es "probablemente el que tiene mayor siniestralidad en España" teniendo en cuenta el reducido número de buzos en activo, que estiman que ronda la cifra de 200 en todo el país.
Cabe recordar que, junto a la patronal --la Asociación Nacional de Empresas de Buceo Profesional (Anebp)-- están intentando conseguir del Ministerio de Fomento una modernización de la normativa que regula la actividad para acercarla a la del resto de países europeos, así como un endurecimiento de las pautas en materia de seguridad, convencidos de que así podrían reducirse de manera significativa las estadísticas de siniestralidad.
Destacan desde el sector las dificultades que están encontrando para lograr este objetivo, por lo que incluso están estudiando plantear una demanda contra la Administración por "dejación de funciones". Asimismo, lamentan la "falta de sensibilidad" de la Administración, pues "nadie de la Dirección General de la Marina Mercante ni del Ministerio" se ha puesto en contacto con los representantes del sector tras el accidente mortal de Los Barrios.
Sobre este último siniestro, explican que ocurrió cuando el profesional se encontraba realizando tareas de limpieza y mantenimiento en una tubería del sistema de refrigeración de la central térmica de Los Barrios y, al parecer, se activó una turbina que acabó por tragarse a este trabajador, que destacan que llevaba un equipo autónomo de respiración --con botella y sin suministro en superficie--, cuya prohibición vienen reivindicando.
Indican que el accidente está siendo investigado por la Inspección de Trabajo, si bien están convencidos de que hubo "errores muy graves" por parte de la compañía, ya que "tenía que haberse garantizado antes de la inmersión que todas las bombas de aspiración estaban paradas", y también por parte de la empresa de buceo para la que trabajaba el fallecido.
Entre otras cuestiones, comentan que aunque el empleo del sistema autónomo está permitido por la legislación actual, "desde luego no parece que fuera lo más apropiado desde el punto de vista de la prevención de riesgos laborales".
Aseguran las citadas fuentes que el sector está decidido a poner todos los medios a su alcance para poner fin a esta situación y a forzar una modificación de la normativa, destacando también la importancia de dejar claro quién va a asumir y de qué manera la gestión y el control de esta actividad, bien sea el Ministerio de Fomento, la Inspección de Trabajo o a través de la Guardia Civil del mar.
Finalmente, resaltan que "faltan muchas cosas" al sector, que ni siquiera está reconocido por la Seguridad Social con características propias en el Régimen Especial del Mar, si bien atajar la siniestralidad es su prioridad, por lo que están dispuestos a adoptar las medidas necesarias para presionar a nivel administrativo y enmendar la situación.
