SANTIPONCE (SEVILLA), 27 Ago. (EUROPA PRESS) -
El exalcalde de Santiponce (Sevilla) José López (IU-CA) ha anunciado que los concejales de la federación de izquierdas presentarán una nueva moción en el Ayuntamiento poncino y propondrán que los diputados autonómicos de la coalición hagan lo propio en el Parlamento andaluz, para visibilizar la situación que sufre el monasterio fortificado de San Isidoro del Campo, declarado bien de interés cultural (BIC) y reciente escenario del expolio de dos azulejos del siglo XVI.
José López ha manifestado a Europa Press que frente al "silencio" que protagoniza el gobierno municipal de coalición del PSOE y el PA, cuyo pacto le depuso de la Alcaldía a través de una moción de censura, los concejales de IU-CA pretenden visibilizar en las instituciones la sustracción de estos dos azulejos del siglo XVI, obra del ceramista Niculoso Pisano, que ornaban una de las paredes del majestuoso Claustro de los Muertos del mencionado monasterio, junto a la capilla del Cristo de Torrijos. Los azulejos, de aproximadamente un metro cuadrado cada uno, tenían obviamente valor histórico y artístico.
Por eso, ha manifestado que los concejales de IU-CA elevarán al pleno del Ayuntamiento de Santiponce una nueva moción relacionada con el monumento, recordando que el pasado mes de marzo, una moción inicial de la federación de izquierdas destinada a instar a la Consejería de Cultura a volver a abrir los domingos y festivos el monasterio, fundado en 1301 por Guzmán el Bueno, no prosperó finalmente al votar en su contra los cuatro ediles del PA y los tres del PSOE. Dado el caso, ha acusado a ambas fuerzas de bloquear las demandas en favor del monumento.
VISITA AL MONASTERIO
Igualmente, los ediles pedirán a los diputados autonómicos de IU-CA que promuevan alguna iniciativa parlamentaria al respecto, invitándoles además a visitar el municipio y conocer 'in situ' la situación del monasterio, una joya artística que combina el arte gótico con el mudéjar y el barroco, pero que claramente no goza del suficiente conocimiento por parte de la sociedad civil. El monasterio, abandonado por los monjes jerónimos en 1978, fue declarado Monumento Nacional ya en 1872.
José López, de cualquier modo, avisa de que pese a que se trata de un monumento "muy grande", con no pocas estancias, muchas veces sólo cuenta 'in situ' con "un vigilante para todo el recinto y un celador o celadora para abrir las puertas". "De seis personas que había para atender a las personas en cada sala o estancia, ya sólo hay una", ha criticado recordando además que el monumento cierra los domingos y festivos, extremo todo ello de la contracción del gasto que las administraciones dedicaban al recinto.
Entretanto, el monasterio sigue cerrado en el marco de la investigación promovida por la Guardia Civil para esclarecer el expolio, y las labores de restauración del muro del claustro de los muertos que acogía los dos azulejos desaparecidos.
