OVIEDO, 21 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de Oviedo ha dado luz verde a la modificación del Plan de Movilidad Urbana que supondrá cambios en 10 de las 13 rutas existentes en la ciudad y la creación de una nueva línea, lo que conllevará para el municipio uno gasto de 200.000 euros.
Los cambios incrementarán en 26,8 kilómetros un recorrido que será cubierto por el mismo número de autobuses, lo que en términos económicos se prevé que, al aumentar el número de viajeros, se mantendrán las condiciones actuales pero incrementándose el precio por viajero de 0,75 céntimos a 0,77 céntimos.
Los cambios "han sido resultado de más de 20 reuniones con 54 asociaciones y organizaciones vecinales, representantes de la empresa TUA (Transportes Unidos de Asturias) y con todos los grupos políticos", ha asegurado la concejala de Infraestructuras, Ana Rivas, en rueda de prensa este viernes. Para la puesta en marcha de estos cambios, el Ayuntamiento ha recopilado numerosas quejas y propuestas planteadas por cada grupo.
"No podemos decir fecha exacta, pues hay muchos trámites por delante, pero se espera que los cambios en las líneas se hagan efectivos en los próximos meses", ha asegurado la edil. A esto ha añadido que, tras la aprobación y publicación del Plan de Movilidad en el BOPA, se abrirá un periodo de 20 días hábiles para alegaciones y posibles modificaciones "antes de tramitar los ajustes necesarios".
Los principales cambios que han sido aprobados se encuentran en las líneas A, B, E, F, G, J, K, L y M. El nuevo trayecto será cubierto por la línea R. "Se puede llamar R porque era la letra que tocaba o R porque es una línea rápida entre el polígono del Espíritu Santo y las Facultades del Cristo, que servirá para descongestionar las líneas C y D. Lo único que el R sólo circulará los días laborales y en verano no accederá a las facultades. Esta línea permite a los vecinos de Colloto acceder fácilmente al HUCA", ha declarado Rivas.
En cuanto al resto de rutas, la línea A tendrá como punto de salida el Centro Médico y no Llamaquique como hasta el momento. La línea B se ampliará hasta La Bolguina, atravesará La Florida y Villamar, y mejorará el servicio en la falda del Naranco.
La línea E, tras los cambios solicitados por los vecinos, pasará de transitar por la calle Francisco Cambó y se trasladará a la calle Marcelino Suárez. La línea F incorporará su servicio en los barrios de Villafría y Prados de la Fuente, lo que supone una creación de 5 nuevas paradas, así como el cambio de ubicación de los postes.
La línea G cambiará las horas de salida y su punto de partida será el Centro Médico. En la J, los vecinos podrán conectar con la línea F gracias a la creación de una nueva parada en Villafría, que les permite llegar al HUCA. La línea K partirá de Plaza América y su recorrido se ampliará a las localidades de Santo Medero, Ayones y Llagú, lo que supondría la eliminación del recorrido por Montecerrao.
En cuanto a la línea L, los vecinos de San Roque en Anieves podrán coger el transporte público gracias a la creación de una nueva parada. Para finalizar, el último cambio será en la línea M, que tendrá como punto de inicio y final la plaza Primo de Rivera y la Estación de Renfe para mejorar la seguridad de la parada y cubrir una mayor demanda ciudadana.
A estos cambios, Rivas ha manifestado que una vez aprobado el Plan en el BOPA, se comenzará la contratación de las obras para crear nuevas paradas con marquesinas, adecuar cruces y aceras o añadir nueva señalización, entre otras.
