OVIEDO, 26 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Fundación para la Conservación del Quebrantahuesos considera que la causa del fallecimiento del ejemplar de quebrantahuesos llamado 'Chloe' en Asturias fue un conjunto de circunstancias que van desde su estado físico (había sido agredido por un águila real), las condiciones meteorológicas adversas y las bajas reservas (pesaba 3,9 kilos cuando debía pesar seis kilos).
Pero además, a esos factores se une el contacto del animal, aunque en muy baja dosis, con sustancias altamente toxicas. Los informes realizados tras la necropsia, se constató la presencia residual de un producto de alta toxicidad (Aldicarb) que está prohibido en España desde el año 2007 y por tanto de uso ilegal. No obstante, desde la Fundación Quebrantahuesos señalan a través de una nota de prensa que "en base a los resultados no podemos confirmar que el animal ha muerto por una intoxicación".
Chloe era uno de los tres ejemplares de quebrantahuesos cedidos por el Gobierno de Aragón como parte del programa de reintroducción de la especie en los Picos de Europa y que fueron liberados el pasado verano en el Parque Nacional. El cuerpo del animal fue hallado muerto en Onís en el mes de febrero.
