Unas 2.500 viviendas de Santander pueden controlar su consumo de agua a través del proyecto 'Smart water'

Belén Domínguez, a la derecha
UC
Actualizado: miércoles, 29 julio 2015 13:55

SANTANDER, 29 Jul. (EUROPA PRESS) -

Unas 2.500 viviendas de Santander son usuarias del programa 'Smart water' a través de una aplicación "innovadora" y "bidireccional" para la gestión sostenible e inteligente del agua que permite conocer y, por tanto, controlar el consumo individual, o comunicar incidencias y avisos relacionados con la red de abastecimiento y con la de alcantarillado.

Así lo ha destacado este miércoles en El Torco la directora general de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Santander, Belén Domínguez, durante su participación en el seminario 'Desarrollo sostenible y aguas residuales: experiencias y nuevos retos en la gestión del agua' que, hasta el próximo viernes, se desarrolla en la sede de los Cursos de Verano de la Universidad de Cantabria (UC) de Suances.

Según ha resaltado Domínguez, este proyecto está a punto de finalizar su segunda fase, después de una primera etapa realizada en un "barrio piloto", desarrollada en la zona de Nueva Montaña, en la que, actualmente, funciona "al cien por cien", y con un sistema de gestión inteligente del agua del que se pueden beneficiar unos 1.200 clientes, es decir, en torno a 3.000 ciudadanos.

El proyecto 'Smart water' surge a raíz de un convenio de colaboración entre la UC, la empresa que gestiona el servicio de agua en la ciudad, --FCC Aqualia--, y el Ayuntamiento de Santander que, además de proporcionar al usuario datos "en tiempo real" sobre sus consumos, facilita a "cualquier ciudadano" información sobre la calidad del agua y su gestión.

La directora general de Medio Amniente del Ayuntamiento de Santander ha explicado que la segunda fase de esta iniciativa ha incorporado funciones como el drenaje sostenible o la huella hidríca para ver cómo mejora la gestión del agua y "cómo también estamos mejorando todos los temas de cambio climático asociados a ella".

En la actualidad, el proyecto se está desarrollando en una zona del centro de Santander, en concreto, aledaña a la plaza del Machichaco, en donde los clientes ya tienen instalados los telecontadores y también están colocados los sensores de red.

Al igual que en la primera fase, se podrá medir la turbidez, el cloro y el ph del agua en la zona pero, como novedad, además se va a controlar la presión y los niveles de colector. Igualmente, se controlarán los caudales de llegada a ese sector y los caudales que se utilizan en las bocas de riego de la ciudad.

Domínguez, que ha apuntado que Santander está siendo "una especie de laboratorio" para las aplicaciones inteligentes, también denominadas como 'smart', ha destacado que, en esta segunda etapa del proyecto, solo queda instalar una pantalla en la plaza del Machichaco para que cualquier ciudadano pueda ver "en tiempo real" cuáles son los parámetros de calidad de la red de abastecimiento de agua de la ciudad.

Es, por tanto, un proyecto que se va implantando de forma progresiva, de manera que su aspiración es abarcar toda la ciudad de Santander, pero, según ha remarcado Domínguez, supone "una gran inversión", con lo que debe realizarse a lo largo del tiempo y programada para varios años, además de que una de las complicaciones "más grandes" es la comunicación de los datos.

Y es que, bajo su criterio, al estar ante iniciativas "innovadoras" y "novedosas" como ésta, a veces sucede que la idea y el proyecto "van un poco más rápido" que la propia tecnología que se puede implementar en las calles.

En este sentido, los datos se trasladan vía radio pero, para extender el sistema a toda la ciudad, se están buscando sistemas que lo hagan por vía telefónica, es decir, que con repetidores en distintos puntos de la ciudad sea suficiente para esa transmisión de información y "no tener que poner tantísimos cuadros de control".

En conclusión, Domínguez ha asegurado que este proyecto es "vital" para el gestor del servicio y para el Ayuntamiento de Santander supone poner a su alcance una información "validísima" para mejorar el servicio que se presta al ciudadano, al que también le proporciona, además, una información "muy interesante" respecto a "su propia" gestión del agua en su vivienda.