Feve inicia una campaña de promoción de sus vías verdes accesibles desde estaciones de ferrocarril

Vía Verde
FEVE /EUROPA PRESS
Actualizado: miércoles, 1 junio 2011 18:17

SANTANDER, 1 Jun. (EUROPA PRESS) -

Feve ha presentado este miércoles en el apeadero de Perlora (Carreño) la campaña de promoción de las Vías Verdes que la empresa está llevando a cabo con el fin de desarrollar un concepto integral de ecoturismo basado en el ferrocarril, considerado eslabón principal de una cadena ecológica que comienza con la recuperación para el transporte no motorizado de las vías de ancho métrico abandonadas y continúa con el uso de las líneas y estaciones en servicio como acceso idóneo a estas rutas.

La campaña promocional consiste en la instalación de vallas con carteles informativos, como la que se ha visitado esta jornada, en cada una de las 9 Vías Verdes accesibles desde las estaciones y apeaderos de Feve, una de ellas, la Vía Verde del Pas, en Cantabria.

Esta vía se localiza entre Obregón y Puente Viesgo. Tiene una longitud de 34 kilómetros, de los cuales, 24 son de asfalto y 8 son de tierra compactada.

El medio natural en que discurre es el Parque Natural de Peña Cabarga, LIC del río Pas; praderías pasiegas, bosques caducifolios, y bosques de ribera.

Como patrimonio cultural cuenta con los Balnearios de Alceda y Puente Viesgo; y las cuevas prehistóricas de Puente Viesgo, y como arquitectura civil destacan la Torre de El Soto, la colegiata de Casatañeda, Palacio de Gándara, Conjunto Histórico-Artístico de Alceda-Ontaneda, y el Palacio de Fuentes Pila.

Esta vía verde, acondicionada por el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, tiene su origen en la antigua línea de vía estrecha El Astillero-Ontaneda, inaugurada en 1902, y que se concibió como la primera fase del proyecto de que Santander tuviera una salida directa hacia la Meseta, según la documentación consultada por Europa Press. Sin embargo, Ontaneda nunca vió pasar los trenes más allá de su estación.

En los años veinte, las obras del ferrocarril Santander-Mediterráneo, que también feneció antes de nacer, hizo olvidar al de Astillero sus planes de gran ferrocarril transmesetario.

Finalmente, siendo ya explotado por Feve, sus malos resultados económicos hizo que fuera cerrado en dos fases, entre 1973 y 1976. Hoy este antiguo ferrocarril que iba desde una villa litoral a otra pasiega, da soporte a una espléndida vía verde de 34 kilómetros, llena de alicientes en su recorrido por el valle del Pas.

CAMPAÑA

Según ha informado la empresa, la campaña promocional consiste en la instalación de vallas con carteles informativos, como la que se ha visitado este miércoles, en cada una de las 9 Vías Verdes accesibles desde las estaciones y apeaderos de Feve. El objetivo de estos carteles es ubicar a los viajeros y explicar las características de los recorridos adyacentes que pueden realizar tras bajarse del tren.

Las Vías Verdes son itinerarios no motorizados ideados para el disfrute de paseantes, ciclistas o patinadores. Están diseñadas para que cualquier usuario pueda disfrutar del ocio y del deporte al aire libre, sin limitaciones de edad o capacidad física.

Las personas con movilidad reducida, los ancianos y los niños, se benefician de forma especial de estas infraestructuras, ya que son accesibles en tren, seguras y fáciles de recorrer. Además, suponen un apoyo al uso de la bicicleta, ya que Feve permite su transporte en los trenes, consolidando así el binomio tren+bicicleta como la alternativa más cómoda y sostenible para quienes deseen disfrutar de estas rutas sin recurrir a la carretera.

Dentro de esta misma campaña se han llevado a cabo otras acciones, como la edición de un vídeo promocional para su proyección en ferias, congresos y seminarios, y la publicación de una guía con los 17 itinerarios que discurren sobre antiguo suelo ferroviario de ancho métrico. Las 17 Vías Verdes disponibles en la actualidad suman en total 350 kilómetros de trayectos cicloturistas y senderistas repartidos por Asturias, Cantabria, Castilla y León, Euskadi, La Rioja, Cataluña, Comunidad Valenciana y Andalucía.

La mayoría de éstas son espectaculares vías verdes asturianas como la Senda del Oso, la Vía Verde de Fuso, la de La Camocha o los antiguos trazados de Mieres. Pero también permiten acercarse a la Vía Verde del Pas en Cantabria desde la estación de Astillero, o a la burgalesa del Santander-Mediterráneo a través de la estación de Pedrosa.

Las Vías Verdes tienen unas señas de identidad homogéneas que permiten distinguirlas por su origen ferroviario e identificarlas como recurso turístico novedoso y de calidad. Su creación conlleva la participación del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, Comunidades Autónomas, Diputaciones y Ayuntamientos, y también implica a colectivos y agrupaciones locales. En este momento, existen ya más de 1.800 kilómetros de Vías Verdes, procedentes de todos los anchos de vía, repartidos por toda nuestra geografía.