LAREDO, 28 Ago. (EUROPA PRESS) -
El alcalde de Laredo Texas, Raúl Salinas, ha destacado la "cálida acogida" que le ha brindado la villa pejina en su estancia en Laredo y que concluirá mañana viernes, 29 de agosto, con su presencia en la 105 edición de la Batalla de Flores.
Tras tres días en Laredo, Salinas ha visitado y conocido distintos elementos de la villa cántabra y ha recorrdio sus "espectaculares" paisajes. "Si pudiera vivir un tiempo aquí, me mudaba sin pensarlo", ha reconocido.
Así lo ha indicado en el discurso que ha pronunciado este jueves antes de firmar la declaración con la que el alcalde estadounidense y su homólogo de Laredo, Ángel Vega, han ratificado el hermanamiento de ambas ciudades.
En el preámbulo del acuerdo se recuerda que ambas poblaciones firmaron el acuerdo de constituirse en Ciudades Hermanas el 21 de febrero de 1978. Asimismo, se destaca que "a lo largo de estos 36 últimos años, se han ido incrementando las relaciones de amistad, intercambiando experiencias sobre nuestras tradiciones, nuestra cultura, nuestra economía, nuestro lenguaje y nuestras costumbres".
La rúbrica ha tenido lugar en la Casa de Cultura ante casi doscientas personas. El auditorio ha seguido con gran interés las palabras del alcalde de Laredo Texas, que ha evocado el reciente encuentro en su ciudad de los alcaldes de los Tres Laredo, sumando al regidor de Nuevo Laredo, en la provincia mexicana de Tamaulipas.
"Allí tenemos el río Grande, que no nos separa, sino que nos une", y puso como ejemplo los puentes que comunican ambas ciudades y por los que circulan, a diario, casi 12.000 camiones.
El alcalde estadounidense ha revelado que el 90% de la población de su ciudad está conformada por hispanos, y ha destacado que "ante tanta división como se ve a nivel global, es bueno el ejemplo que estamos dando de unirnos, a pesar de vivir lejos, esto debe ser un ejemplo para el resto del mundo".
Tras la protocolaria firma de los documentos oficiales, ha tenido lugar la conferencia del director del Archivo Municipal, Baldomero Brígido, bajo el título de 'Laredo en el descubrimiento y conquista del Nuevo Mundo'.
Una ponencia que ha puesto de manifiesto el relevante papel que desempeñó la villa pejina entre los siglos XVI y XVIII. En aquella época fueron numerosas las expediciones marítimas que se hicieron a las nuevas tierras recién descubiertas y en las que Laredo ostentó una serie de privilegios que los reyes sólo otorgaron a los puertos principales.
El historiador, que está ultimando un libro sobre dicha etapa histórica, ha avanzado algunas de las claves de una investigación que revela una ingente cantidad de navegantes y barcos laredanos sobre los que se ignoraba su existencia e importancia.
