La FOP advierte que se están generalizando acciones ilegales como atraer a osos con cebo para fotografiarlos

Huella del oso localizada por el Seprona
GUARDIA CIVIL
Actualizado: viernes, 3 julio 2015 14:13

SANTANDER, 3 Jul. (EUROPA PRESS) -

La Fundación Oso Pardo (FOP) ha advertido de que se están generalizando acciones ilegales como atraer a osos con cebo para fotografiarlos, una práctica "ilegal" y que puede tener "consecuencias".

La FOP se ha pronunciado así en un comunicado, un día después de que el Seprona de la Guardia Civil haya dado por concluida la investigación que comenzó el 3 de junio a raíz del ataque de un oso a un hombre en Villaescusa del Bardal (Campoo de Enmedio) concluyendo que se trata de un hecho aislado y que el animal pudo reaccionar de esta manera al entender que se invadía su espacio. En la zona próxima al ataque se localizó cebo y una cámara de foto trampeo que pertenecía al herido.

Este viernes, la FOP ha explicado que "nada más conocerse" que un oso había mordido a un vecino, pidió por escrito al Seprona que el suceso fuera investigado, e hizo llegar a la guardería de la Dirección General de Montes del Gobierno de Cantabria su sospecha de que podrían estar utilizándose cámaras automáticas con cebos en ese monte. La posterior investigación, según ha dicho, "confirmó este hecho, ya que encontraron una cámara automática asociada a un cebo con sardinas y miel".

En su comunicado, la Fundación ha mostrado su preocupación porque "estas acciones ilegales se estén generalizando en toda la Cordillera Cantábrica", y de hecho, ya ha denunciado dos casos similares vinculados a la fotografía de osos, uno en Liebana (Cantabria) y otro en el Parque Natural de Somiedo (Asturias).

"Se trata de una actividad ilegal que lleva asociada la posibilidad de atraer un oso y tener un encuentro próximo que termine en agresión; o de generar un proceso de condicionamiento trófico, es decir, acostumbrar a los osos a buscar la comida aportada por los humanos. Un oso habituado o condicionado por la comida humana es una fuente de problemas en unos montes tan humanizados como los cantábricos", ha subrayado la Fundación.

Por ello ha solicitado a las administraciones autonómicas cantábricas una mayor vigilancia sobre esta actividad y una "puesta al día de la normativa que regule y sancione adecuadamente estos hechos".

Por otra parte, ha recordado que los osos cantábricos no son agresivos y que los únicos cinco casos de agresión a humanos que ha habido desde 1999 han sido consecuencia de que los osos se han visto amenazados por la presencia muy próxima de los humanos.

"Los usuarios del monte no tienen nada que temer de los osos, pero no hay que olvidar que la naturaleza es salvaje y no se deben provocar situaciones de riesgo adentrándonos en zonas de matorral espeso o roquedos, donde descansan osos y otros animales, acercándonos excesivamente a un animal o utilizando cebos para fotografiarlos u observarlos", ha concluido.