El secretario general de Política de Defensa alerta de que el yihadismo "está apuntando también a España"

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EUROPA PRESS
Actualizado: lunes, 6 julio 2015 12:08

Asegura que el ISIS es una "pura pantomima" y cuando desaparezca "no quedará nada detrás, sólo esas filmaciones horrendas"

SANTANDER, 6 Jul. (EUROPA PRESS) -

El secretario general de Política de Defensa, Alejandro Enrique Alvargonzález, ha alertado este lunes en Santander de que el yihadismo y el Estado Islámico (DAESH) es una "amenaza real" para España porque "nos están apuntado también a nosotros" y hay "ciudadanos españoles que han sido asesinados", y ha advertido de que "no son una pandilla de desarrapados", sino terroristas "preparados que han aprendido a odiar".

No obstante, ha comentado que las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado en España "hasta ahora están funcionando hasta donde pueden funcionar". "España es un puente entre dos continentes, dos religiones, dos culturas, dos mares, dos niveles de desarrollo y dos completas cosmovisiones", ha comentado, al tiempo que ha incidido en que "cuanto ocurre en el Mediterráneo y en el Sahel nos importa".

"Otros países creen que se pueden dejar llevar, pero nosotros no podemos ser pasivos con lo que ocurre en nuestro entorno si queremos participar en la creación de nuestro destino. Y, desde luego, no somos pasivos", ha comentado durante su intervención en la inauguración del encuentro 'Desafíos del terrorismo yihadista', que ha comenzado este lunes en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP).

Además, ha asegurado que el Estado Islámico "no busca rédito político, sino que el horror es el rédito del horror", que es una "herramienta perfectamente calculada y deliberada". "El terror cría clientela, adeptos y crea dificultades en la moral del enemigo del DAESH si no está lo suficientemente preparado". De esta forma, Alvargonzález ha confesado que "no son enfermos", que cuentan con la "lealtad de otros grupos terroristas" en África y Asia, como Boko Haram, y que las actuaciones aéreas de los 22 países de la coalición internacional "no es suficiente porque DAESH resiste".

"Si tuviera que definirlos con una palabra, diría malos en el sentido infantil. Hay maldad en ellos y saben aprovechar la maldad en su provecho. Evidentemente, quienes han logrado un control territorial del género que han logado estos sujetos, tienen una preparación, aunque desde aquellos que llegan desde países europeos, uno puede encontrar de todo, desde desequilibrados hasta aventureros", ha relatado preguntado sobre la preparación de estos terroristas.

En este sentido, ha añadido que "lo que sí es cierto es que no se están centrando en crear una estructura ideológica, lo que facilita que el rastro que dejen cuando desaparezca se limite al error que han venido produciendo". Igualmente, ha avisado de que "si el norte de África se aproxima a la desestabilización, España tendría que participar en su seguridad porque sería la nuestra", al igual que España participa en misiones militares en Mali, Somalia, Líbano o Irak.

Asimismo, ha incidido en que "una bajada de temperatura" en el conflicto palestino-israelí "ayudaría a apostar por el caballo ganador". "Bin Laden decía que entre un caballo fuerte y uno débil, la gente suele apostar, por naturaleza, por el fuerte. El fuerte ahora, o así se percibe, es DAESH, y eso está erosionando a Al Qaeda. Quizás estemos de suerte porque su pobreza (la de DAESH) es su falta de doctrina. Es pura imagen, pura pantomima. Cuando caiga, no quedará nada detrás, solo esas filmaciones horrendas que a todos nos obligarán a repetir ante las pruebas del mal lo que tantas veces ha repetido la Humanidad: nunca más", ha manifestado.

"LA SOLUCIÓN NO ES MILITAR", SINO "POLÍTICAS TRANSVERSALES"

En cuanto a las soluciones contra el yihadismo, ha manifestado que la lucha aérea de la coalición internacional "necesita ser completada con una lucha terrestre, porque la (de las fuerzas) iraquí no es suficiente". "Es localmente en Irak como se resolvería (el problema) y no llevando botas --en alusión a soldados-- de otros países", ha declarado, al tiempo que ha aclarado que la solución final no es militar, sino que "abre paso a las soluciones que son, en buena parte, políticas transversales", aunque ha reconocido que "no es fácil".

"Siria, Irak y Libia son los reservorios de la infección. En Irak y Siria la solución pasa por integrar a los sunitas y por constituir un Estado de coalición nacional en el que todos quepan confortablemente", ha comentado, al tiempo que ha añadido que la solución política también debe estar basada en un "equilibrio entre Irán y Arabia Saudí" para que no se inicie una carrera nuclear a la que pueda sumarse Turquía porque es "extremadamente preocupante que se desarrolle una carrera nuclear en un área tan inestable".

Asimismo, ha recalcado que la solución al yihadismo también pasa "por cerrar heridas regionales entre sunitas y chiítas". "Casi nada", ha apostillado Alvargonzález, que ha alertado sobre el peligro de los llamados retornados, que están "preparados para recibir instrucciones", así como del uso de las redes sociales y las nuevas tecnologías como potenciador de las comunicaciones cibernéticas de los terroristas y entre estos y las redes internacional de narcotráfico.

TRES CONFLICTOS

Durante su intervención, en la que también se ha centrado en cómo el DAESH se aprovecha de los Estados fallidos para estructurar el suyo propio y en la que ha recordado el surgimiento de las Primaveras Árabes y el estallido de la violencia cuando Mohamed Bouazizi se quemó a lo bonzo en Túnez, ha relatado que actualmente existen tres conflictos.

En concreto, se trata de la lucha del yihadismo "contra los símbolos de Occidente", la que existe entre "sunitas y chiítas" y la conflictividad entre Irán y Arabia Saudí, que se "entremezclan", al tiempo que ha incidido en que el yihadismo "ha permitido a Bashar El Asad internacionalizar el conflicto" en Siria, pasando a ser "de local a geoestratégico".

Además, Alvargonzález ha destacado que "ya no se trata de atacar la soberanía de las naciones ni el intento de imponernos una determinada ideología". "El objetivo se centra en el desprecio a nuestros valores, en el respeto a cualquier atrocidad que comenta (el DAESH) bajo el mando de una creencia que dicen religiosa y en la causa superior de imponer su orden", ha comentado.