SANTANDER, 20 Jul. (EUROPA PRESS) -
El consejero de Turismo de Cantabria, Francisco Martín, ha expresado su deseo de que el tiempo "mejore", si se tiene en cuenta la meteorología en lo que va de verano, con días de mucho calor que dan paso a jornadas de intensas lluvias y tormentas.
Pero, no obstante, ha asegurado que desde el punto de vista turístico, la región está "muy preparada" para "hacer frente" a veranos como el de este año.
"Todos deseamos que el clima mejore pero, afortunadamente la región está muy preparada en lo turístico para hacer frente a veranos como el que se está revelando este año", ha manifestado Martín, también responsable de Innovación, Industria y Comercio.
En este sentido, ha asegurado que en Cantabria, que está "de moda" y es "infinita", hay "mil cosas que hacer".
Así lo ha dicho a preguntas de los periodistas sobre los pronósticos -no muy halagüeños- de los meteorólogos para lo que resta de estío, cuestión que Martín ha zanjado con un "nadie es perfecto. Ni los meteorólogos".
Ha indicado al respecto que el "chaparrón" que ha caído este viernes por la mañana "no estaba previsto", y ha agregado a continuación que "es posible que el sol que haga por la tarde tampoco" esté contemplado.
Y es que -ha explicado- cuando se producen gradientes térmicos "tan importantes" como los que se están registrando estos días, la aparición de nubes de desarrollo es "prácticamente impredecible".
Al igual que resulta "imposible" hacer predicciones "a largo plazo", es decir, para los próximos meses, ya que es "impredecible" saber el tiempo que hará más allá de una semana, periodo en el cual sí se pueden conocer las "tendencias generales".
Al propósito de estos plazos, el responsable cántabro de Turismo ha confiado en que el arranque de las fiestas de Santander -esta tarde, con el chupinazo- suponga "un cambio radical" respecto al tiempo de las últimas horas y "mejore". Ha añadido que la semana que viene tiene "buena pinta", pese a "algún puntito" de nubosidad.
"Esto va a mejorar", ha pronosticado y deseado Francisco Martín, con la esperanza de que los meteorólogos "más pesimistas no tengan "razón" y los optimistas sean "los que realmente se lleven gato al agua".
