Actualizado: martes, 17 enero 2017 11:32

SANTANDER, 17 Ene. (EUROPA PRESS) -

El Ayuntamiento de Santander sorteará el próximo martes, 24 de enero, las dos viviendas de alquiler social cedidas por CaixaBank en el marco de la línea de colaboración abierta por el Consistorio con diferentes entidades financieras.

Con estos dos pisos se amplía el parque de alquiler social de la ciudad, del que se benefician ya 17 familias y al que se quieren sumar nuevas viviendas con la participación de los bancos, según ha destacado el Consistorio. El sorteo, al que optan 48 personas, tendrá lugar a las 10 horas en el Salón de Recepciones.

El Ayuntamiento ha agradecido a CaixaBank su "implicación social" y su "apuesta" por Santander con estas dos viviendas, de dos y tres habitaciones respectivamente.

En el último año, el Consistorio ha incorporado 29 viviendas destinadas tanto al parque extraordinario de alquiler social como a la Red Enlace, a través de la cual se ceden pisos a asociaciones y entidades para la acogida de personas en situaciones de riesgo, para promocionar la vida autónoma de colectivos con necesidades especiales o para atender a familias con dificultades.

La edil del área, María Tejerina, ha reiterado el compromiso del equipo de gobierno municipal del PP para facilitar el acceso a la vivienda a los vecinos con mayores dificultades, bien mediante la construcción de pisos de protección oficial a precios más competitivos que en el mercado libre o bien a través del parque de alquiler social y la Red Enlace.

Además, la concejala ha recordado que el Ayuntamiento dispone de otras 162 viviendas repartidas por la ciudad y destinadas a alquileres asequibles.

El Consistorio mantiene también un convenio con el Colegio de abogados para la prestación del servicio de la Oficina de Intermediación Hipotecaria, se han ampliado las ayudas económicas municipales para poder incluir en algunos supuestos el pago de hipotecas y se trabaja con los juzgados para ser más eficaces ante posibles casos de desahucio.

Los solicitantes de estas viviendas debían llevar al menos un año empadronados en Santander y cumplir unos baremos económicos, de forma que los ingresos totales de la unidad familiar no superaran dos veces el IPREM (Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples).

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