TOLEDO, 24 May. (EUROPA PRESS) -
El Ejecutivo de Castilla-La Mancha calcula que, en dos años, en torno a 3.100 personas se podrán beneficiar de la línea de ayudas del programa Garantía+55, cuya orden de bases ha aprobado este martes el Consejo de Gobierno, y que está destinado a los mayores de 55 años que estén percibiendo un subsidio del Servicio Público de Empleo Estatal (Sepe) de 426 euros, con el fin de que puedan aumentar la base de su cotización realizando "trabajos colaborativos".
El presidente regional, Emiliano García-Page, y la consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco, han dado a conocer este programa, dotado con casi 10 millones de euros para los ejercicios 2016 y 2017, cuya orden de bases ha aprobado este martes el Consejo de Gobierno, y cuya convocatoria saldrá "el próximo martes o el siguiente".
Franco ha resaltado que Garantía+55 es una iniciativa para que los mayores de 55 años que se quieran incorporar al circuito natural de la vida laboral puedan "sentirse útiles" realizando "trabajos colaborativos" en colaboración con las entidades locales, ayuntamientos, agrupaciones locales, diputaciones o entidades sin ánimo de lucro.
El Garantía+55 tiene un "carácter voluntario" porque no se puede "forzar a las personas que se encuentran cómodas con su salario", ha precisado Franco, que ha indicado que la ayuda del Ejecutivo a las distintas entidades será de 500 euros por trabajador, a fin de cubrir el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) o mantener la última base de cotización del trabajador.
García-Page, por su lado, ha resaltado que este programa supondrá no solo la recuperación de capacidades y el hábito del trabajo sino también "la capacidad para cotizar por más cantidad y tener una mejor pensión", para evitar que estas personas "se consideren hasta los 65 estancados y parados a la fuerza" y puedan "recuperar el itinerario de su cotización".
