BRUSELAS/TOLEDO, 25 Ene. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha reivindicado este miércoles en Bruselas la necesidad de "trasladar" la protección que ofrece la Unión Europea a los productos agroalimentarios comunitarios a otras producciones, como el sector artesanal y el de cuchilleros castellano-manchegos.
"Ningún consumidor discute la ventaja de la protección de productos alimentarios. Todo el mundo ha asumido que es una forma de proteger nuestra producción y de que no se deslocalice", ha explicado García-Page en declaraciones a la prensa en la sede del Parlamento Europeo.
El presidente autonómico ha trasladado esta petición en la serie de encuentros que ha previsto con representantes de las instituciones de la UE a lo largo de este miércoles, incluido el vicepresidente primero de la Comisión Europea, Frans Timmermans.
A juicio del presidente castelllano-manchego, si se extendieran las Indicaciones Geográficas Protegidas (IGP) a los productos no agroalimentarios se lograría "luchar contra el fraude" de productos que llegan de mercados terceros, en especial el asiático, y en ningún caso supondría atentar contra el libre comercio. Se trata, ha insistido García-Page, de que "no se puedan hacer cuchillos de Albacete en China".
En efecto, el Ejecutivo comunitario está "estudiando" la posibilidad de avanzar en esta dirección, tras una consulta pública, pero no ha tomado ninguna decisión al respecto, según han explicado a Europa Press fuentes comunitarias. Y en todo caso, han añadido, aun si Bruselas tomara una decisión favorable para presentar una propuesta, ello no ocurriría "antes de 2018".
PROTECCIÓN QUE "YA EXISTE FUERA DE EUROPA"
"Se pide una protección que ya existe fuera de Europa para los productos no agroalimentarios", ha recalcado, por su parte el representante de la Asociación de Cuchillería y Afines (APRECU) de Albacete, Juan Andrés Barbero García, que ha viajado a Bruselas en representación del sector artesanal manchego.
Barbero García ha insistido en las ventajas que este cambio aportaría al consumidor, ya que la marca protegida daría confianza y garantías de la calidad del producto. Y ha confiado en que sea "posible lograrlo en 2017", pese a la dificultad de las negociaciones para impulsar un nuevo reglamento.
Barbero García ha subrayado que sin esta marca de protección los artículos importados del mercado asiático, pero que no han cumplido el proceso artesanal, llegan sin identificar la diferencia. Ello "engaña o confunde" al consumidor, ha alertado.
El presidente ha estado acompañado es su viaje por el presidente de la Federación Regional de Artesanos (Fracaman), Roberto Perea; el responsable de la Asociación de Cuchillería y Afines (Aprecu) de Albacete, Juan Andrés Barbero; y su próxima sustituta al frente de la entidad, María Pilar Jiménez, así como de varios miembros de su Ejecutivo.
El presidente regional ha mantenido este miércoles una reunión de trabajo con la vicepresidenta del Parlamento Europeo, Evelyne Gebhardt, y el eurodiputado Nicola Danti, ponente del informe sobre la protección de las indicaciones geográficas de la UE a productos no agrícolas, para abordar la situación del sector artesano de la región y de la cuchillería de Albacete, una industria con más de 1.000 puestos de trabajo asociados.
