La ministra de Cultura aplaude la capacidad de la Real Fundación y Barreda dice que el proceso iniciado en Vega Baja "es irreversible"
El alcalde de Toledo anuncia la intención del Ayuntamiento de hermanarse con Heraklión, ciudad natal de El Greco de cara al 2014
TOLEDO, 17 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Rey don Juan Carlos felicitó hoy a la Real Fundación de Toledo "de corazón" por los 20 años de trayectoria que lleva realizando actividades "al servicio de la promoción de la cultura desde esta ciudad única y emblemática" que "merecen todo mi reconocimiento y aliento" y el de los ciudadanos, que ven en esta a la institución que mejor defiende el patrimonio de la ciudad.
En las breves palabras que dirigió al término de la entrega de los Premios Real Fundación de Toledo, en su XIV edición, don Juan Carlos expresó, además, su felicitación a los galardonados, cuyas trayectorias "sirven de ejemplo y estímulo a todos". También se refirió a las actividades de conmemoración del IV Centenario de la muerte de El Greco en 2014, que prepara la capital, a las que mostró su "pleno respaldo".
Precisamente, el Rey fue el encargado de entregar su premio al Archivo Municipal de Toledo, la Asociación de Amigos de los Patios de Toledo, el Hospital Nacional de Parapléjicos, la Casa Sánchez Medina y, a nivel nacional, al Festival de Teatro Clásico de Almagro y a la Fundación César Manrique, cuyo presidente, José Juan Ramírez, habló en nombre de todos los galardonados, para defender el valor "presente y futuro" del patrimonio y su "progresismo".
Ramírez señaló que la conservación del patrimonio y su puesta en valor son un "arma pacífica cargada de futuro", para cuyo desarrollo es "prioritario tomar conciencia" en las cuestiones del día a día, con "profesionalidad" y "con decisiones de calidad compartidas", seguro de que las administraciones públicas deben tener una "mentalidad patrimonializadora" frente "a la amenaza del parque temático mundial".
Por su parte, el presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, quien se comprometió a incluir la protección del paisaje en la futura Ley de Protección regional, hizo referencia a la Vega Baja de Toledo, por cuyo futuro mostró "tranquilidad y seguridad" ya que, subrayó, "hemos hecho lo más difícil, salvándola de los bloques de ladrillo", convencido de que "el valor de lo contenido en Vega Baja es sencillamente incalculable.
Barreda animó a la participación de la Real Fundación y la Academia de Bellas Artes y Ciencias Históricas de la ciudad en el ordenamiento de esta zona, que recibirá "la categoría de protección que mejor convenga a lo planificado", y dijo comprender "la impaciencia" que existe con este proyecto aunque --matizó-- "tengo la tranquilidad de que hemos iniciado un proceso que es irreversible, y hay trabajos y tareas que no se pueden improvisar de la noche a la mañana".
De otro lado, se refirió a los ríos y concretamente al Tajo, a propósito de su papel fundamental en esta ciudad patrimonio, y refirió que su caudal "debe aumentar considerablemente" para "abrazar Toledo con más agua". En este punto, habló del Estatuto de Autonomía de Castilla-La Mancha donde "debe asegurarse una reserva estratégica que garantice en cantidad y calidad nuestras necesidades presentes y futuras".
En último término, José María Barreda --que aplaudió el reinado de don Juan Carlos como el periodo en libertad "más largo y más fecundo de la historia de España--, comprometió la ayuda del Gobierno de Castilla-La Mancha con la conmemoración del IV Centenario de la muerte de El Greco "para conmemorarla como se merece", y para que el 2014 convierta a Toledo "en referencia internacional".
PORTADORES DEL FUTURO CULTURAL
Previamente, la ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde, que reiteró su intención de tener preparado el borrador de una nueva Ley de Patrimonio antes de final de este mismo año, para una mejor coordinación con las diversas normas de patrimonio de las comunidades autónomas, felicitó a la Real Fundación por su labor y por unos premios "que reconocen la importancia del trabajo bien hecho".
González-Sinde, que resaltó los distintos rincones de una ciudad como Toledo, aplaudió la capacidad y el talento de la Real Fundación "para ligar pasado y presente y fundir cultura y valores medioambientales en pro de lo colectivo". Se dirigió también a los premiados, a los que definió como "necesarios y decisivos como portadores de gran parte de nuestra esperanza en el futuro de la cultura de todo nuestro país".
En su intervención, el alcalde de Toledo, Emiliano García-Page, que precisó que "no hay forma de defender el Toledo monumental si no se considera a la ciudad como un proyecto global", y que reconoció el "mucho trabajo" que está costando "cohesionar la ciudad", por sus restricciones y limitaciones, anunció en este acto el comienzo inmediato de la redacción del Plan Director de la Vega Baja, una zona que "no será ningún tapón ni un agujero en nuestro desarrollo".
Además, García-Page adelantó la firma "inmediata" de un convenio con la Universidad de Castilla-La Mancha para la cesión de terrenos, lo que convertirá a la Fábrica de Armas en uno de los mejores campus universitarios, comunicado con la ciudad, a la que ahora mira "de perfil". También pidió una "movilización clara" por el cauce del río Tajo y avanzó la intención del Ayuntamiento de formalizar su hermanamiento con Heraklión, la ciudad donde nació El Greco, de cara a la celebración del IV Centenario de su muerte en 2014.
LA REAL FUNDACIÓN PROSEGUIRÁ
El presidente del Patronato de la Real Fundación de Toledo, Gregorio Marañón y Bertrán de Lis, con un discurso, lleno de "encargos" a las distintas instancias y administraciones, en el que recordó los 20 años cumplidos por la Real Fundación, de la que ahora hay que asegurar la continuidad, "con el fin de que la sociedad civil mantenga este cauce para comprometerse con el devenir de Toledo". "La Real Fundación proseguirá, trascendiéndonos", auguró.
Marañón y Bertrán de Lis, que abrió el acto de entrega de premios con su intervención, expresó su enhorabuena a todos los premiados durante el acto de hoy, confiando en que su ejemplo se difunda porque "fundamentan nuestra arraigada creencia de que los tiempos presentes y venideros serán siempre mejor que los pasados".
De forma previa, la presidenta de la Junta de Protectores de la Real Fundación, Inés de Sarriera, que reconoció que los actuales son "tiempos difíciles para las Fundaciones", recordó que, aunque con la crisis la cultura y el patrimonio "corren el peligro de ocupar un lugar secundario", su preservación incluye un abanico de acciones activadores de todos los sectores de la economía de una ciudad.
Tras agradecer el comportamiento de los protectores, hizo un balance de los 20 años de la Fundación, en los que se han realizado 450 proyectos, entre los que resaltó la restauración de distintos monumentos, la realización de 26 exposiciones, más de 200 cursos, coloquios y conferencias y 40 conciertos y grabaciones y, por encima de todos ellos, la recuperación del Museo Victorio Macho y Roca Tarpeya.
Todos los galardonados recibieron una medalla del escultor Julio López Hernández, que representa, por un lado la imagen de un joven viajero "que despliega y mira el plano de la ciudad" y por el otro el ascenso desde el Puente de San Martín hacia Toledo.
