BURGOS, 12 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Policía Nacional de Burgos detuvo a un joven de 23 años, D.M, vecino de la capital, por un presunto delito de malos tratos en el ámbito familiar, después de que, supuestamente, se personara en casa de su expareja para tratar de retomar la relación y acabara agrediéndola, según informaron a Europa Press fuentes de la Subdelegación del Gobierno.
La Policía Nacional fue requerida a través de la sala del 091 debido a que una mujer solicitaba ayuda en el domicilio familiar. Una vez allí, los agentes encontraron a la víctima en gran estado de nerviosismo, momento en el que ésta narró que había mantenido una discusión
con su expareja ya que se había presentado en su casa con intención
de retomar la relación.
La víctima explicó que su exnovio había comenzando a discutir con ella cuando recibió en su móvil un whatsapp. El sujeto se puso violento y causó lesiones a la mujer de las que tuvo que ser atendida por los servicios médicos.
Al percatarse de que la policía había sido alertada, el hombre huyó del domicilio, si bien fue localizado con posterioridad en su propia vivienda, diferente de la de la víctima.
El varón fue detenido como autor de un presunto delito de malos tratos en el ámbito familiar y pasó a disposición judicial
