LLEIDA, 20 Feb. (EUROPA PRESS) -

La junta directiva de la Asociación Empresarial de la Fruta de Catalunya (Afrucat) ha ratificado este viernes su posición sobre la necesidad de mantener Lleida como zona protegida del fuego bacteriano y ha acordado solicitar a la Conselleria de Agricultura que destine los recursos que sean necesarios para que esto sea posible.

En la misma línea se pronunció este jueves también Unió de Pagesos, según un comunicado de la organización en el que muestra su rechazo a la decisión del Departamento la semana pasada de dejar fuera de la zona protegida todas las explotaciones frutícolas de Lleida.

Afrucat ha asegurado en un comunicado que, una medida como la propuesta por el Departamento en la mesa sectorial de la semana pasada, abocaría al sector productor de la manzana y pera de Lleida a un período de depresión que duraría entre 4 y 5 años con mucha incertidumbre y un fuerte descenso de la producción.

"Pasado este lapso de tiempo, y a partir de un incremento forzoso en la sensibilización del payés, el cambio en el manejo permitiría una cierta recuperación productiva", señala la asociación empresarial.

La reacción de la junta de Afrucat, una vez debatida la propuesta del Departamento, es de preocupación, ya que la medida se tomaría en el año inmediatamente posterior al de la peor campaña frutícola que se recuerda, con un productor muy minado en su capacidad de inversión que no podría hacer frente por sí solo a la renovación de plantaciones, en caso de que esta fuese necesaria.

Afrucat también ha hecho un balance entre lo que le podría suponer al DAAM la moratoria de al menos un año en el cambio de estrategia y lo que le representaría al sector la aplicación inmediata de la medida.

Mientras que la ayuda anual del Departamento para los arranques y replantaciones de las zonas afectadas oscilaría entre 1 y 2 millones de euros, las pérdidas del sector podrían llegar al 50% de la producción actual de pera y al 30% en manzana.