Dos choques frontales mortales en una semana por circular en sentido contrario
BARCELONA, 19 Feb. (EUROPA PRESS) -
El accidente mortal en contra dirección de este lunes en el Eix Transversal, la C-25, una vía desdoblada, sucedió porque la conductora se equivocó y accedió a la vía por la salida de Les Oluges (Lleida), según la principal hipótesis de los Mossos d'Esquadra.
Según han informado a Europa Press fuentes de la policía catalana, la conductora, de 73 años, accedió por error a la C-25 a la altura del kilómetro 88 y circuló unos 30 kilómetros, hasta el kilómetro 120, donde impactó frontalmente con otro turismo en Rajadell (Barcelona).
La investigación ha descartado 'a priori' que la mujer, vecina de Cervera (Lleida), condujera bajo los efectos de alcohol o drogas, y todo indica que accedió por error al sentido contrario de la vía, pese a que es una vía desdoblada.
En el accidente, que ocurrió el lunes a las 17.17 horas, resultaron heridos el marido de la conductora que viajaba con ella y dos ocupantes del otro turismo, que fueron evacuados el Hospital de Manresa con pronóstico menos grave.
ACCIDENTE SIMILAR
Paralelamente, los Mossos investigan las causas del accidente mortal en circunstancias similares de este miércoles a las 13.25 horas, cuando una conductora de 76 años chocó con otro vehículo mientras circulaba en sentido contrario por la autopista C-32 en Mataró (Barcelona), y las primeras investigaciones apuntan a que no fue una acción intencionada.
Según ha informado el Servei Català de Trànsit (SCT) en un comunicado, la conductora que viajaba en contra dirección, de 76 años y vecina de Barcelona, murió en el choque frontal con el otro coche, cuyo ocupante resultó herido muy grave y fue evacuado en helicóptero al Hospital Germans Trias i Pujol.
Las dos víctimas tuvieron que ser rescatadas por los Bomberos de la Generalitat, puesto que los vehículos quedaron totalmente destrozados por el impacto.
Un tercer caso de circulación en contra dirección en una vía de alta velocidad ocurrió el sábado en la autovía A-2 en Mollerussa (Lleida) con un conductor bebido, de 52 años, aunque en este caso no se produjo ningún accidente.
Tras recibir el aviso de varios conductores, los Mossos d'Esquadra detuvieron al hombre sobre las 23 horas después de que recorriera una veintena de kilómetros en contra dirección por esta autovía, y diera positivo a la prueba con una tasa de 0,80 miligramos de alcohol por litro de aire espirado.
