Elaboran un informe ante "la preocupación creciente" por el aumento de casos
BARCELONA, 9 Jun. (EUROPA PRESS) -
Un informe elaborado por la Federación Salut Mental Catalunya (SMC) y la Fundació Pere Tarrés alerta de la falta de coordinación e inversión en los servicios de atención de niños y jóvenes con problemas de salud mental en Catalunya.
El estudio 'Informe atención a la salud mental infantil y adolescente en Catalunya 2016', en el que han participado más de 40 expertos, ha sido presentado este jueves en rueda de prensa por sus autoras Rosa Coscolla y Marta Poll.
El informe, que ha consultado a más de 150 fuentes, se ha impulsado ante la "preocupación creciente" de las entidades por el aumento de enfermedad mental en niños y adolescentes, ha explicado el presidente de SMC, Israel Molinero.
Según el documento, la intervención está "muy fragmentada" con miradas y planes de trabajo parciales; existen pocos espacios para la coordinación interprofesional; hay un conocimiento insuficiente del conjunto de recursos, su funcionamiento y distribución, y un déficit formativo y competencial.
Marta Poll ha remarcado que esta situación causa una "discontinuidad asistencial y una respuesta dilatada y no siempre adecuada", hecho que se podría mejorar con un trabajo más integral de los servicios: planes de trabajo y objetivos conjuntos, herramientas compartidas y espacios estructurados.
También ayudaría el desarrollo de programas formativos compartidos; incorporar la coordinación con recursos comunitarios de educación en el ocio y de apoyo a los niños y adolescentes, espacios de crianza y asociaciones de madres y padres de alumnos (Ampa), y mejorar la transición hacia los recursos para adultos.
FALTA DE INVERSIÓN EN DETECCIÓN
Destaca la falta de inversión planificada en prevención, puesto que se destinan más esfuerzos al tratamiento clínico que en la detección precoz de los síntomas: "Si hacemos acciones desde la base estaremos invirtiendo en la reducción del 10%-20% de población con problemas de salud mental", según Coscolla.
Ha avisado de que un 3,8% de los menores de entre 4 y 14 años tiene riesgo de sufrir un problema de salud mental, y el 7,1% va al psicólogo, porcentaje que ha aumentado un 5% en los últimos años, según datos de la Encuesta de Salud de Catalunya (Esca).
Además, los Centros de Salud Mental Infantil y Juvenil (CSMIJ) atendieron en 2014 a 62.000 menores de 18 años, un 28% más que cinco años atrás, lo que supone un aumento de 14.000 niños atendidos, y los centros de atención precoz de cero a seis años están "absolutamente saturados".
Según Molinero, este aumento se debe a una mayor capacidad de diagnóstico y derivaciones a los CSMIJ, pero también a las dificultades socioeconómicas de las familias y a otras situaciones de riesgo, como por ejemplo la separación de los padres.
"La pobreza y la exclusión social acentúan la dificultad en el acceso y también hace incrementar los problemas de salud mental", ha deplorado Coscolla, quien también ha apuntado que el lugar de residencia puede general desigualdades.
PIDEN MÁS RECURSOS
Molinero ha indicado que desde la Conselleria de Salud se destina menos de un 4% a este ámbito --sin contar el gasto farmacéutico--: "Si pudiéramos llegar al 5% se notaría mucho", y ha añadido que servicios sociales invierte un 6% de su presupuesto.
Respecto al plan integral impulsado desde la Generalitat en julio de 2014, ha dicho que las entidades serán "muy exigentes para que se dote de recursos y tire adelante", aunque opinan que es muy ambicioso y un buen instrumento, ha añadido Marta Poll.
