"El problema es lo que le estamos haciendo al planeta", dice la escritora
BARCELONA, 21 Abr. (EUROPA PRESS) -
La escritora Donna Leon ha integrado por primera vez la conciencia ecológica y los valores medio ambientales en su última novela negra, 'Restos mortales' (Seix Barral): "El problema no es si la derecha o la izquierda o lo que los chinos están haciendo en África. El problema es lo que le estamos haciendo al planeta".
"Es lo más cerca que he estado de escribir un libro polémico", ha asegurado la considerada una de las grandes damas de la novela negra y Premio Pepe Carvalho 2016, que este domingo participará en la Diada de Sant Jordi, donde espera tener un encuentro directo con los lectores.
Sin erigirse en una científica o una gran especialista sobre ciencias de la tierra, ha escogido esta temática como hilo narrativo de la historia protagonizada por el comisario Brunetti, que en esta ocasión coge unas vacaciones, aconsejado por su doctora e insistido por su esposa Paola.
Finalmente, el protagonista se va a pasar una temporada a una casa familiar en San Erasmo, la isla más grande de la laguna veneciana, y allí entabla amistad con el hombre encargado de cuidar la casa, un hombre duro y peculiar preocupado por la misteriosa desaparición de sus abejas.
"BESO DE LA MUERTE"
La autora ha descartado querer moralizar a sus lectores, y se ha desmarcado de los libros de denuncia y de sermones: "Convertirse en predicador es un beso de la muerte para un escritor que quiere aleccionar a su público y quiere adoctrinarlo".
"Mi única propósito es dar placer a la gente que se acerca a esta historia, no es que yo sea un payaso de circo, pero sí: es mi trabajo", ha subrayado la escritora, que ha dicho que no piensa ambientar en este país una de sus historias criminales.
TRES LIBROS SOBRE ÓPERA
Sobre la temática de la nueva novela, ha optado por esperar un par de años antes de escribir otro libro sobre ecologismo: "No puedo hacer a los lectores esclavos de mis obsesiones. Ya he escrito tres ficciones sobre la ópera".
Donna Leon (Nueva Jersey, 1942) ha vivido en Venecia desde 1981, y desde hace poco vive en Suiza; preguntada por la victoria de Donald Trump en EE.UU., ha bromeado con que "tiene que haber algo en el agua", si bien no ha querido ahondar en las razones que han motivado esta elección.
Ha argumentado que el desmantelamiento de la Agencia de Protección Ambiental y su negativa de la existencia de un calentamiento global conforman toda una "declaración de intenciones" sobre la figura del republicano, del que ha advertido sobre las consecuencias de su política en el mundo.
