Una paciente de Morín dice que ingresó para abortar al día siguiente de llamar a la clínica

Carlos Morín y su esposa en 1ªfila, en el 2ºjuicio por abortos ilegales
EUROPA PRESS
Actualizado: miércoles, 10 febrero 2016 11:26

BARCELONA, 10 Feb. (EUROPA PRESS) -

Una paciente del doctor Morín, acusado de un centenar de abortos supuestamente ilegales, ha explicado en juicio como testigo que ella ingresó para interrumpir su embarazo al día siguiente de llamar a la clínica porque las pruebas le diagnosticaron que nacería con Síndrome de Down.

En su comparecencia este miércoles ante la Audiencia de Barcelona, la paciente --la primera en declarar-- ha relatado que estaba embarazada de unos cuatro meses y medio o cinco meses; el límite legal se situaba en las 22 semanas.

La mujer ha relatado que en el Hospital de Palamós (Girona) donde la atendían le dijeron que no podían hacerse cargo de este aborto, con lo que se puso en contacto con un ginecólogo privado, que a su vez le derivó a una de las clínicas de Morín.

"Llamé y al día siguiente ya fui a abortar", ha explicado la paciente, que ha añadido que ingresó un día por la mañana pero la interrupción del embarazo se la practicaron al día siguiente por la mañana, y que tuvo que pedir un préstamo para pagar la intervención.

A preguntas de la fiscal, la paciente ha explicado que "estaba destrozada" cuando se sometió al aborto y que ya anteriormente había interrumpido un embarazo en la misma clínica.

REPETICIÓN DEL JUICIO

Esta paciente ha abierto la ronda de declaraciones de mujeres en el juicio, que ha tenido que repetirse por orden del Tribunal Supremo (TS) porque la Audiencia absolvió a Morín --junto a su mujer y a nueve acusados más-- sin haber tenido en cuenta como prueba el testimonio de los periodistas de una televisión danesa que había hecho un reportaje con cámara oculta en sus clínicas.

Pese a que la práctica totalidad de las defensas solicitaron que las mujeres no tuvieran que volver a declarar y limitarse a reproducir un DVD con su declaración en el juicio de 2012, finalmente el tribunal aceptó la petición de la fiscal de que las pacientes vuelvan a testificar.