BARCELONA, 26 Abr. (EUROPA PRESS) -
El pleno del Parlament de Catalunya ha aprobado este miércoles la proposición de ley del impuesto sobre activos no productivos de las personas jurídicas, conocido como el impuesto de 'bienes de lujo', gracias a los votos de JxSí, la CUP y SíQueEsPot, con la abstención del PSC y los votos en contra de Cs y PP.
El tributo, que fue acordado por JxSí y la CUP para forjar el pacto de los Presupuestos del 2017, gravará activos de personas jurídicas como bienes inmuebles, vehículos de motor de potencia igual o superior a 200 caballos, embarcaciones de ocio de más de ocho metros de eslora o más, aeronaves, objetos de arte, antigüedades y joyas.
Tendrá un mínimo exento de 500.000 euros o de 100.000 euros si no hay ningún inmueble, el tipo impositivo es progresivo del 0,21 al 2,75%, y el importe del impuesto se aplicará a partir del 30 de junio de este año.
La diputada de JxSí Carmina Castellví ha destacado que el impuesto pretende recaudar para hacer una "redistribución más justa de la riqueza" y luchar contra el fraude fiscal para evitar la ocultación de bienes que eluden el impuesto de patrimonio.
Antonio Espinosa (Cs) ha criticado que la ley es "un brindis al sol para contentar a la CUP" y ha sostenido no combatirá la evasión fiscal ni mejorará la redistribución de la riqueza, ya que cree que la recaudación será escasa.
El socialista Òscar Ordeig también ha asegurado que "es la contrapartida por el voto de la CUP en los presupuestos", ha cuestionado que sea un impuesto contra grandes fortunas y ha echado en cara a los independentistas que no hayan aceptado ninguna de las enmiendas presentadas por el PSC.
El 'cupaire' Benet Salellas ha negado que la ley tenga que ver con el voto de la CUP en los presupuestos, y ha defendido que es un "gesto humilde" para frenar al capital y perseguir la evasión del impuesto de patrimonio.
Pese a su voto favorable, el diputado de SíQueEsPot Joan Coscubiela ha calificado el impuesto como un "placebo para limpiar las malas conciencias" por no haber hecho reformas fiscales y ha alertado de que puede ser impugnado porque considera que puede suponer grabar lo mismo que el impuesto de patrimonio.
El diputado del PP Santi Rodríguez ha opinado que "lo que es un activo no productivo es esta ley", ya que considera que el impuesto no tendrá ningún efecto positivo.
