BARCELONA, 15 Sep. (EUROPA PRESS) -
La escritora y dramaturga Yasmina Reza (París, 1959) ha presentado este lunes en el Instituto Francés de Barcelona su nueva novela 'Felices los felices', ganadora del Premio Le Monde 2013, una "constelación" de 18 personajes.
La novela se centra en la vida de estos protagonistas que, en un primer momento, parecen no tener nada en común, pero que como si de una "constelación" se tratase, sus vidas están sorprendentemente interrelacionadas, ha descrito la autora en rueda de prensa este lunes.
Se trata de una explosión de fantasías, adulterios, decepciones y frustraciones sexuales, da comienzo cuando Pascaline y Lionel descubren que la obsesión de su hijo por Céline Dion no tiene remedio.
Reza, acostumbrada a convertir las relaciones de pareja en el pilar de casi todas sus obras, afirma que no es imaginativa en sus argumentos, pero sí le interesan los distintos puntos de vista en los que se construyen las relaciones.
Pese a tener fama de frívola y cruel con sus personajes, ella afirma tajante que éstos son siempre, en cierto modo, felices, ya que, en palabras de la escritora, "ser feliz es una disposición, no depende de las circunstancias".
La dureza y la tragedia de tinte cómico que se percibe en sus obras se debe principalmente a aquello que más le llama la atención: los desafíos de la vida en común, el amor, el paso del tiempo, la soledad y la muerte, y más allá de la etiqueta de crítica de la vida burguesa, sólo intenta retratar a aquellas personas que "aspiran a tener un buen día".
'Felices los felices' analiza la estructura de la pareja como algo pesado, improvisada en torno a una pareja de la que han nacido a su alrededor multitud de eventualidades imposibles de controlar, y Reza insiste en rechazar toda visión pesimista que pueda transmitir su obra, ya que como escritora afirma "no saber nada" ni ser socióloga: el escritor no afirma, se dedica a la búsqueda, y no a fijar ideas hechas.
La ironía con la que suele cargar la mayoría de sus obras, ya sean teatrales o narrativas, la extrae de esas "locuras pasajeras que a todo el mundo le pasan por la cabeza en algún momento", de forma constante, y aislando esa locura emerge toda una estructura, cómica pero trágica en esencia, ha explicado Reza.
Reza se ha mostrado muy interesada por el lado más neurótico del ser humano a lo largo de su carrera, como pueden demostrar otros trabajos suyos como 'Un dios salvaje' (2007), que Roman Polanski llevó a la gran pantalla en 2011, o 'El alba la tarde o la noche' (2008), un retrato del expresidente de la República Francesa, Nicolás Sarkozy.
