MELILLA, 29 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Policía Nacional ha descubierto este martes a una bebé de nueve meses en el interior de una bolsa que portaba en su mano una mujer que resultó ser argelina cuando pasaba la frontera con Melilla y que a raíz de los movimientos del mismo pudo ser percibida por los agentes del control documental del puesto fronterizo que separa la ciudad española de Marruecos. El bebé es del sexo femenino y, tras las pruebas médicas que se les han practicado en un centro sanitario, se ha comprobado que se encuentra bien de salud.
Según han informado a Europa Press fuentes policiales, los hechos han ocurrido pasadas las 12,00 horas en el puesto de Beni-Enzar, cuando los agentes del control documental de peatones que inspeccionan la documentación de las personas que se dirigen desde Marruecos a Melilla vieron a una mujer con una bolsa que presentaba movimientos.
Este hecho infundió sospechas a las policías, que pidieron a la mujer que mostrara el contenido de la bolsa y vieron "con sorpresa" que se trataba de un ser humano, en concreto una bebé.
A raíz de este hecho, la Policía Nacional puso en marcha el protocolo para este tipo de casos y entre las medidas realizadas, estuvo la retención de la mujer para conocer las causas por las qué ha intentado pasar a la pequeña y la de llevar al bebé al Centro de Salud, donde se le practicaron pruebas médicas y se comprobó que se encuentra bien.
Ahí han detallado que se trata de una niña de tan solo nueve meses de edad que, junto con su madre, han sido acogidas en el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) a la espera de lo que determine el expediente que se ha abierto por entrada irregular en España.
La madre y la pequeña han sido acompañadas en todos momentos por una pareja de la Policía Nacional hasta que se comprobó que se trataba de una nueva modalidad de entrada irregular en Melilla y se decidió su acogida en el CETI.
