Actualizado 23/09/2016 16:24

Nueva cárcel de Ceuta recibirá presos con arraigo y no peligrosos

CEUTA, 23 Sep. (EUROPA PRESS) -

El delegado del Gobierno en Ceuta, Nicolás Fernández Cucurull, ha asegurado que el proceso de apertura de la nueva cárcel de la ciudad, cuya puesta en marcha está programada para "el primer semestre de 2017", solo conllevará el traslado desde otros centros penitenciarios del país de presos "con arraigo local" y "que no tenga un perfil peligroso".

La nueva prisión tendrá capacidad para multiplicar por siete la población reclusa de la ciudad autónoma, que actualmente se sitúa en unas 200 personas. El equipamiento construido en Loma Mendizábal, cerca del perímetro fronterizo con Marruecos, dispone de 700 celdas dobles y su volumen de ocupación "idóneo" se cifra en mil individuos.

Su tamaño fue el mayor objeto de controversia social en Ceuta cuando se planteó su construcción, que ha exigido una inversión de más de 120 millones de euros.

Su apertura supondrá, según ha señalado Fernández Cucurull este viernes en los actos institucionales del Día de la Merced, "un gran salto cualitativo en las infraestructuras penitenciarias de Ceuta".

"Vamos a pasar de un edificio del siglo XIX a otro del siglo XXI, una infraestructura de vanguardia que permitirá aplicar soluciones avanzadas, acordes con nuestro tiempo y que, al mismo tiempo supondrá un notable impacto positivo en términos económicos en nuestra ciudad, tanto por el personal funcionario y laboral que se irá incorporando a medida que el centro adquiera carga de trabajo como por los suministros que contratará en el mercado local".

Hasta final de año está previsto completar los procesos de contratación del equipamiento necesario para el "normal funcionamiento" del nuevo centro, así como de "pequeñas obras interiores para solucionar algunos problemas de diseño". Los suministros del equipamiento se llevarán a cabo "en la fecha más cercana posible a la apertura para evitar su deterioro".

El personal adicional necesario para la puesta en marcha de la cárcel se incorporará "en 2017". "En primera instancia" el nuevo centro asumirá "exclusivamente" la población penitenciaria recluida en la actual prisión de Los Rosales y "posteriormente asumirá más carga de trabajo a medida que los recursos presupuestarios lo permitan".

El delegado ha aprovechado su alocución institucional para poner de relieve que "solo construyendo espacios de tratamiento, reeducación y rehabilitación para aquellas personas que cometieron un delito podremos dar respuestas eficaces que incrementen nuestra seguridad y nuestra libertad".

"La cárcel debe ser una escuela de libertad, un espacio para que el interno encuentre nuevas motivaciones para vivir en libertad, un lugar donde adquiera nuevos valores, aprenda a respetar a los demás y encuentre nuevos caminos para conducir su vida", ha defendido Fernández Cucurull: "Quizá sea una utopía pero estas nos marcan siempre la dirección a la que debemos encaminar nuestros esfuerzos".