MADRID, 26 Sep. (CHANCE) -
El comienzo del otoño es el momento en el que muchas personas se proponen empezar a cuidar su alimentación, dejando atrás los desórdenes alimenticios y los excesos de la época estival.
Con la ayuda de Lola Market, te ofrecemos las claves para introducir en los menús de otoño los nutrientes necesarios para afrontar esta nueva estación, los cambios de tiempo y la conocida astenia otoñal, que puede producir síntomas como cansancio, apatía, mal humor y falta o exceso de sueño.
ALIMENTOS DE TEMPORADA PARA AFRONTAR LA VUELTA A LA RUTINA
Los alimentos más recomendables para esta época son aquellos con alto contenido en triptófano, un aminoácido que favorece la producción de serotonina, vitaminas del grupo B y magnesio, que ayudan a combatir el estrés y otros síntomas de la astenia otoñal.
-Legumbres como la verdina, el garbanzo pedrosillano o la alubia roja riojana (también conocida como "casparrón") son una opción perfecta para acompañar guisos y maridar con carnes, embutidos y verduras de otoño. Se pueden encontrar en tiendas especializadas.
-Los huevos son un alimento con gran valor nutricional y fácil de preparar tanto en el desayuno como en las comidas principales. Los que prefieren consumirlos ecológicos o de corral, pueden hacerlo en diferentes establecimientos incluídos en Lola Market.
-El aguacate, el plátano o la piña son frutas perfectas para consumir en otoño ya que ayudan a contrarrestar el estrés por su alto contenido en triptófano. ¡No dejes de incluirlas en la cesta de la compra!
-Frutos secos como los anacardos, las nueces y las avellanas no deben faltar en la cesta de la compra de otoño. Ricos en minerales como el magnesio, resultan el tentempié ideal o para añadir en ensaladas, repostería y dulces.
-Cereales integrales: su consumo es muy recomendable en todas las épocas del año. Su alto contenido en fibra y triptófano lo convierten en el alimento ideal para hacer frente al cansancio y mejorar la salud digestiva. Alimentos como el pan de centeno o el pan de trigo integral contienen alrededor de 1,9 gramos de fibra por rebanada; una taza de salvado de avena 5,2 gramo
