MADRID, 4 May. (CHANCE) -
Irina Shayk y Bradley Cooper hicieron su particular puesta de largo como pareja en la pasada edición de la Gala Met. Un evento que consiguió reunir a los rostros más famosos del cine, la música y la moda norteamericana y al que no pudo faltar una de las parejas más famosas de Hollywood.
Y es que desde que la pareja hiciese oficial su amor en la pasada fiesta de L'Oréal celebrada en París, ambos habían sido reticentes a volver a mostrarse en público.
Algo que se terminó ayer por la noche cuando la top model y el actor abandonaron justos la after party de la Gala Met que se estaba celebrando en la Gilded Lily. Allí también se dieron cita la familia Kardashian al completo y una divertida Beyoncé acompañada por Olivier Rousteing.
Aunque sus guardaespaldas trataron de evitar que los paparazzi captasen a la pareja, los fotógrafos consiguieron fotografiarles a la salida de la discoteca.
Irina lucía un sensual diseño lencero en negro que tomaba el relevo al vestido de Givenchy que lució en la alfombra roja del Metropolitan Museum of Art. Un paseillo donde no posó con su pareja, algo que también evitó otra pareja de moda, Orlando Bloom y Katy Perry.
