MADRID, 23 Feb. (CHANCE) -
Ocho semanas después de dar a luz a su hijo Jameson, Pink empieza a ver los resultados de su vuelta a los entrenamientos para recuperar la figura. La cantante de 37 años lleva dos semanas de duro trabajo con su entrenadora personal, Jeanette Jenkins, y ya empieza a notar los resultados. La artista compartía una fotografía de su rostro sudoroso y contaba a sus seguidores haber bajado la báscula en algo más de dos kilos.
La acróbata y bailarina ha retomado su rutina con el fitness, un ejercicio que practica desde hace tiempo. Sin embargo, queda un largo camino por recorrer porque se ha propuesto perder algo más de 13 kilos. Y no parece un reto demasiado complicado, ya que tras el embarazo de su hija Willow en 2011 logró desquitarse de nada más y nada menos que 22 kilos. "Nos entrenamos cinco veces a la semana", detalló la preparadora física a la revista People. "Lo mezclamos. Era una combinación de entrenamiento de fuerza, trabajo de flexibilidad. Hicimos yoga y pilates", añadió.
Mientras mamá quema calorías en el gimnasio, su marido, Carey Hart, ejerce de niñera. Y si hay que llevarse al pequeño de la casa al trabajo, se le lleva. Precisamente presumió hace unos días en sus cuentas sociales del ratito que compartió con el bebé en el taller de motos, ¿querrá el papá que se vaya acostumbrando a sus aficiones?
