MADRID, 22 Mar. (EUROPA PRESS) -
Un presentador de televisión está obligado a pasar muchas horas delante de las cámaras y por ello, el requisito indispensable para esta profesión es tener una buena presencia. En España damos cuenta de ello y de ahí que contemos con unos 'showman' a los que no les falta ni un ápice de sensualidad ni atractivo.
Nombres como Jesús Vázquez, Jaime Cantizano o Christian Gálvez son fácilmente ligados al mundo de la pequeña pantalla. Pero, más allá de su oficio de comunicadores, los hombres que se encargan de dirigir los programas más vistos de nuestro país son también reconocidos por su increíble atractivo y, en algunos casos, su impecable elegancia.
Como decíamos, Jesús Vázquez ha sido siempre el icono masculino de la televisión. Su belleza y atractivo, aumentando con el paso de los años, no ha dejado nunca indiferente ni a mujeres ni a hombres. Pero, en los últimos tiempos figuras como la de Jaime Cantizano, presentador de 'DEC', o la de Christian Gálvez, el de 'Pasapalabra', han empezado a hacerle sombra.
A estos nombres hay que añadir algunos como el de David Cantero, al frente de los Informativos Telecinco, el nuevo madurito que trae a más de una de cabeza, o el del mítico Javier Sardá, otro que también peina canas pero aún no ha perdido su sex-appeal.
Indudablemente y hablando de presentadores sexies, Jorge Fernández y Manu Carreño también tienen su hueco reservado en esta particular lista. El primero, desde que se proclamara Míster España, no ha dejado de seducir con su atractiva sonrisa a todos los telespectadores que día tras día siguen su programa matinal 'La ruleta de la suerte', de Antena 3.
Por su parte, Carreño quien actualmente ejerce de conductor del área de deportes de Noticias Cuatro además de simpatía, derrocha cierta seducción que le hace destacar por encima de su compañero, Manolo Lama.
Y hablando de simpatía, Ángel Martín también ha logrado entrar en el corazón de multitud de telespectadoras gracias, más que a su físico, a su carisma y su envidiable sentido del humor. Lo mismo que podría pasar en el caso de Florentino Fernández, Pablo Motos o Buenafuente.
