MADRID, 19 Sep. (CHANCE) -
Hasta el último momento, Jorge Vázquez ha estado dándole los últimos retoques a sus prendas. Un colección como la suya, llena de pequeños detalles, esconde muchas horas de trabajo, que “luego merecen la pena”, cuenta a CHANCE el diseñador que el año pasado se llevó el Premio L’Oréal Paris a mejor colección y que este septiembre ha vuelto a la pasarela madrileña sin presiones.
“Yo siempre he dicho que no soy muy de premios, a mí lo que me presiona son las ventas. Me da vértigo que no se pueda vender lo que hago”, reconoce el gallego que ha presentado su colección primavera verano en la MBFWM.
Dos mujeres completamente antagónicas como Ava Garner y Grace Kelly han sido su inspiración para crear Mogambo, una colección que toma el nombre de la popular película ambientada en África que las dos actrices protagonizaron. “Son dos mujeres muy diferentes, pero se complementan en mi colección. Una es sensualidad -refiriéndose a Garner- y otra es delicadeza -dice pensando en Kelly-".
“Cuando visto a una mujer quiero que se sienta bella, la más bella, que crea que es una princesa”, nos cuenta en su vestuario el diseñador que estuvo a punto de vestir a una reina, a la reina Letizia. El año pasado recibió una llamada de Casa Real para que enviara algunas piezas para la reina, sin embargo, hasta el momento, la esposa de Felipe VI no ha aparecido con ningún Jorge Vázquez. “Es un tema del que no quiero hablar porque no me gusta entrar en polémica. Y desconozco si alguna vez la reina llevará alguno de mis diseños”, añade.
Jorge Vázquez no se siente cómodo hablando de este tema y prefiere centrarse en sus diseños y en su show. Su puesta en escena ha sido todo un espectáculo para los sentidos: la sala donde estaba albergada la pasarela olía a África -él se confiesa un maniático de los olores-, a su vegetación y a la arena que decoraba la pasarela para hacernos viajar a algún rincón de Kenia, Uganda, Tanzania o Guinea Ecuatorial. “He querido demostrar que IFEMA no es una nave, que nos puede transportar donde queramos, como también hice en la edición pasada con la moqueta estampada y la puesta en escena con las modelos que se entrecruzaban”.
Los estampados, que son marca de la casa, no han faltado: print animal e incluso de fondo marino, que decoran algunos de los vestidos más espectaculares de su colección con transparencias, tampoco los animales y las máscaras rebordadas en las prendas, como un top blanco que, según Vázquez, es el que resume mejor Mogambo.
Entre los tejidos priman las sedas, los linos naturales, rafias rebordadas a mano como el diseño que abrió la pasarela y que llevó la modelo brasileña Kaliana Santos.
La mujer de Jorge Vázquez es muy elegante y sofisticada, algo que el diseñador echa de menos. “Las mujeres no se arreglan tanto como antes y estamos en un punto en el que todo vale. A mí eso me da pena. La gente tira de jeans, una camiseta y una zapatilla Eso también vale, pero hay más cosas. La mujer es objeto de deseo, es belleza y ha nacido para estar guapa”, apostilla.
