Un quásar pulsante delata la existencia de agujeros negros binarios

Acreción de un disco de polvo en un agujero negro
Foto: ESA / V. BECKMANN (NASA-GSFC)
Actualizado: lunes, 20 abril 2015 18:00

MADRID, 20 Abr. (EUROPA PRESS) -    

   A medida que dos galaxias entran en la fase final de la fusión, se cree que los agujeros negros supermasivos de las galaxias formarán un "binario", o dos agujeros negros gravitacionalmente unidos entre sí.

   En un nuevo estudio, astrónomos de la Universidad de Maryland presentan evidencia directa de un quásar pulsante, lo que puede justificar la existencia de agujeros negros binarios.

   "Creemos que hemos observado dos agujeros negros supermasivos en la proximidad más cerca que nunca antes", dijo Suvi Gezari, profesor asistente de astronomía en la Universidad de Maryland y un co-autor del estudio. "Este par de agujeros negros puede estar tan junto como para emitir ondas gravitacionales, que fueron predichas por la teoría de la relatividad general de Einstein."

   El estudio fue publicado en línea el 14 de abril 2015, en la revista Astrophysical Journal Letters. El descubrimiento podría arrojar luz sobre la frecuencia con que los agujeros negros se acercan lo suficiente para formar un binario unido gravitacionalmente y eventualmente fusionarse.

   Los agujeros negros típicamente engullen materia, que acelera y se calienta, emite energía electromagnética y crea algunos de los faros más luminosos en el cielo, llamados quásares. Cuando dos agujeros negros orbitan como un binario, absorben la materia en función del ciclo, lo que lleva a los teóricos a predecir que el quasar del binario respondería brillando y haciéndose tenúe periódicamente.

   Los investigadores llevaron a cabo una búsqueda sistemática de los llamados quásares variables utilizando el telescopio de observación panorámica y sistema de respuesta rápida (Pan-STARRS1) Medium Deep Survey. Este telescopio con sede en Hawai-Haleakala, tomó imágenes de la misma zona del cielo una vez cada tres días, y recogió cientos de puntos de datos de cada objeto en cuatro años.

   En esos datos, los astrónomos encontraron el quásar PSO J334.2028 + 01,4075, que tiene un gran agujero negro de casi 10.000 millones de masas solares y emite una señal óptica periódica que se repite cada 542 días. La señal del cuásar era inusual porque las curvas de luz de la mayoría de los quásares son arrítmicas. Para verificar su hallazgo, el equipo de investigación realizó cálculos y simulaciones rigurosas y examinó datos adicionales .

   "El descubrimiento de un candidato a sistema compacto de agujero negro supermasivo como PSO J334.2028 + 01,4075, que parece estar en una cercana separación orbital se suma a nuestro conocimiento limitado de las etapas finales de la fusión de agujeros negros supermasivos", dijo el estudiante de Astronomía de la Universidad de Maryland Tingting Liu, primer autor del artículo.

   Los investigadores planean continuar la búsqueda de nuevos quásares variables. A partir de 2023, su búsqueda podría ser facilitada por el Gran Telescopio para Rastreos Sinópticos, que se espera inspeccione un área mucho mayor y podría precisar la ubicación de miles de estos agujeros negros supermasivos fusionados en el cielo nocturno.