MADRID, 14 Jul. (EUROPA PRESS) -
Los cuervos pueden planear con anticipación diversos tipos de acontecimientos e, incluso, que están dispuestos a renunciar a una recompensa inmediata para obtener una mejor en el futuro.
Como los cuervos y los grandes simios no han compartido un ancestro común durante más de 300 millones de años, estos resultados sugieren que las habilidades cognitivas de "planificación" que comparten en común reaparecen en un sendero evolutivo separado en las aves.
La compleja tarea cognitiva de planificar el futuro se ha observado casi exclusivamente en humanos y grandes simios. Algunos córvidos, una familia de pájaros que incluye los cuervos, también han demostrado la capacidad de planificar más allá del momento actual, pero estos hallazgos se han limitado al almacenamiento de alimentos.
Ahora, Can Kabadayi y sus colegas de la Universidad de Lund, en Suecia, buscaron explorar aún más la capacidad de los cuervos para planificar con anticipación a través de una serie de experimentos. En primer lugar, se entrenó a los cuervos a utilizar una herramienta para abrir una caja con el fin de acceder a una recompensa y luego se les presentó la caja, pero no la herramienta. Entonces, se les retiró la caja y una hora más tarde se les dio la herramienta de apertura, así como varios "distractores".
Casi todos los cuervos eligieron la herramienta correcta para abrir los aparatos; y cuando se les presentó con la caja 15 minutos más tarde, utilizaron la herramienta para abrirla, con una tasa de éxito del 86 por ciento.
También se detectó una alta tasa de éxito (78 por ciento) en experimentos similares en los que los cuervos usaron una ficha para luego intercambiar por una recompensa. Los cuervos planean comerciar con más precisión que los monos, informan los investigadores, y están a la par con ellos en las tareas de uso de herramientas, a pesar de carecer de predisposiciones para el manejo de herramientas.
A continuación, se presentó a los cuervos la herramienta correcta de apertura de aparatos, herramientas de distracción y una recompensa inmediata, pero sólo se les permitió seleccionar un elemento. La recompensa inmediata fue menos atractiva que la recompensa en la caja, detallan los investigadores, demostrando un nivel de autocontrol en las aves similar al observado en los simios, como se detalla en un artículo sobre el trabajo publicado en 'Science'.
