MADRID, 16 Feb. (EUROPA PRESS) -
Científicos de la Organización Meteorológica Mundial (OMM) dicen que existe la posibilidad de que se forme un nuevo evento de El Niño a finales de este año.
En 2015 y 2016, un poderoso El Niño impulsó las temperaturas mundiales y jugó un papel en las sequías en muchas partes del mundo. Normalmente, el fenómeno meteorológico sólo vuelve a aparecer cada dos a siete años.
Las condiciones neutrales son más probables a finales de este año, pero también hay un 40% de probabilidad de que se forme un nuevo El Niño, según un comunicado.
El complejo y natural evento meteorológico está marcado por una remontada de agua caliente en el Pacífico que se acumula en la costa oeste de América del Norte y del Sur, causando condiciones tormentosas localmente.
El llamado "Super El Niño" de 2015 y 2016 ha tenido un papel en la elevación de las temperaturas mundiales a máximos récord, según los científicos.
Aunque su efecto se concentra en la costa americana del Pacífico, la influencia de El Niño se siente en todo el mundo, afectando los monzones en Asia y las sequías en África.
A menudo después de un El Niño, se obtiene una marcada reversión de las condiciones, un evento llamado La Niña. Pero según la OMM, las recientes condiciones oceánicas más frías eran sólo intermitentemente indicativas de La Niña, y en enero de este año volvieron a un estado neutral. Tan débil fue el impacto global que muchos científicos lo llamaron "La Nada".
Sin embargo, frente a la costa de Perú hay una imagen diferente.
Las temperaturas oceánicas en la región se han incrementado en 1,5 grados Celsius por encima del promedio, creando un "El Niño costero", que según los científicos podría convertirse en un evento más generalizado, aunque las condiciones generales son aún más probables.
Para lograr un estatus oficial de El Niño, las temperaturas en una gran parte del Pacífico ecuatorial tienen que estar por lo menos 0,5 grados por encima del promedio y mantenerse durante tres meses, informa la BBC.
"Es un poco inusual, pero no completamente sin precedentes", dijo Rupa Kumar Kolli, de la OMM. "Por lo menos para la primera mitad de este año, las condiciones neutrales continuarán; si este El Niño costero se expande y se convierte en un típico El Niño, lo sabremos con más confianza después de la primavera".
Los investigadores dicen que para el mes de mayo tendrán una imagen mucho mejor. Pero ellos creen que dado los posibles impactos que un El Niño puede traer, es mejor plantear la posibilidad ahora para que las autoridades puedan estar preparadas.
"Si realmente el El Niño despega, entonces tiene muchas implicaciones para muchas de las regiones del monzón", dijo Kolli. "Se asocia con un gran monzón en gran parte del sudeste asiático - y la sequía en algunas partes de África. La gente debería ser consciente de estas posibilidades".
