MADRID, 21 Mar. (EUROPA PRESS) - Cada vez que una luna se rompiera y se reformara a partir del anillo resultante, su luna sucesora sería cinco veces más pequeña que la última, según el modelo, y los escombros habrían llovido en el planeta, posiblemente explicando enigmáticos depósitos sedimentarios encontrados cerca del ecuador de Marte. Minton y Hesselbrock ahora centrarán su trabajo en la dinámica del primer sistema de los anillos que formaron o los materiales que han llovido en Marte de la desintegración de lunas.