MADRID, 21 Sep. (EUROPA PRESS) -
Antropólogos han calculado que la Isla de Pascua albergó hasta 17.500 habitantes en su apogeo como Rapa Nui, lo que constata una compleja estructura social en este remoto enclave del Pacífico.
Llamada Rapa Nui por sus habitantes, la isla ha estado rodeada de misterio desde que los europeos llegaron por primera vez en 1722. Los primeros visitantes estimaron una población de 1.500 a 3.000 personas, que parecía en desacuerdo con los casi novecientas estatuas gigantes repartidas por toda la isla. ¿Cómo esta pequeña comunidad construyó, transportó y erigió estas grandes figuras de roca?
Un nuevo estudio, publicado en la revista de acceso abierto Frontiers in Ecology and Evolution, espera desentrañar este misterio al dar la mejor estimación del tamaño máximo de población sostenido por la Isla de Pascua en su apogeo.
"A pesar de su aislamiento casi completo, los habitantes de la Isla de Pascua crearon una complicada estructura social y estas asombrosas obras de arte antes de un cambio dramático", dice en un comunicado Cedric Puleston, autor principal de este estudio, con sede en el Departamento de Antropología de la Universidad de California, Davis.
"Hemos tratado de resolver una pieza del rompecabezas para determinar el tamaño máximo de la población antes de que cayera, y parece que la isla podría haber estado poblada por 17.500 personas en su apogeo, lo que representa el extremo superior del rango de estimaciones anteriores".
Y añadió: "Si la población cayó de 17.500 a la pequeña cantidad que los misioneros contaron muchos años después del contacto europeo, presenta una imagen muy diferente de la población máxima de 3.000 o menos que algunos han sugerido".
La evidencia arqueológica anterior implica que los pueblos indígenas fueron mucho más numerosos que los 1.500-3.000 individuos encontrados en el siglo XVIII. La historia de la población de la isla sigue siendo altamente polémica. Además del conflicto interno, el 'shock' poblacional se ha atribuido al ecocidio, en el cual los recursos de la isla fueron agotados por sus habitantes, reduciendo su capacidad de sustentar la vida humana.
Puleston y sus colegas examinaron el potencial agrícola de la isla antes de que ocurrieran estos eventos, para calcular cuántas personas podría sostener la isla.
"El proyecto, financiado por la Fundación Nacional de Ciencias de Estados Unidos, involucró una serie de muy buenos investigadores, entre los arqueólogos, un experto local en la cultura Rapa Nui, un científico del suelo, un bioquímico y biólogo de la población, para obtener una imagen completa de lo la isla era como antes del contacto europeo", explica.
"Examinamos mapas detallados, tomamos muestras de suelo alrededor de la Isla, colocamos estaciones meteorológicas, usamos modelos de población y estimamos la producción de camote. Cuando teníamos dudas sobre uno de estos factores, analizamos el rango de sus valores potenciales para elaborar diferentes escenarios".
Se encontró que el 19% de la isla podría haber sido utilizado para el cultivo de camote, que era la principal cosecha alimenticia. Mediante el uso de información sobre cómo las tasas de natalidad y muerte en diversas edades dependen de la disponibilidad de alimentos, los investigadores calcularon el tamaño de la población que el nivel de producción podría sostener.
"El resultado es una amplia gama de posibles tamaños máximos de población, pero para obtener los valores más bajos hay que asumir lo peor de todo", dice Puleston. "Si comparamos nuestras estimaciones agrícolas con otras islas polinesias, una población de 17.500 personas en una isla de este tamaño es totalmente razonable".
