MADRID, 26 Nov. (EUROPA PRESS) -
El 21 de noviembre de 2014 el Consejo de Ministros aprobó un Real Decreto donde se regulan los procedimientos de equivalencia académica de las titulaciones universitarias anteriores al Plan Bolonia con los niveles del Meces (o Marco Español de Calificaciones de la Educación Superior), entre ellos, el máster. Desde que los comienzos del nuevo Espacio Europeo de Educación Superior, en España la denominación máster aparece ligada al término "oficial" (o másteres adaptados), frente al máster realizado hasta este momento o "título propio" de universidades con validez dentro de nuestro sistema educativo nacional.
Con anterioridad se dio un impulso destacado, gracias al artículo 6 del Real Decreto 861/2010, del 2 de julio, el cual establece la posibilidad de que la capacitación cursada a través de un máster título propio sea reconocida en oficial, hasta un mínimo de un 15% del total de créditos ECTS que componen el plan de estudios reconociendo objetivamente un nivel de cualificación superior al de Grado.
El área de los profesionales de la salud es el mejor ejemplo y uno de los sectores más afectados. Bien es reconocido que nuestro país es referente en ciencias de la salud y sus profesionales quienes más emigran en búsqueda de empleo actualmente; así tener un máster de enfermería es parte del pasaporte para estos graduados y viceversa, también es destino educativo de referencia para los profesionales internacionales de estos campos, ya que formarse y tener un título propio certificado en España otorga prestigio a quien lo consiguió.
· El nivel de excelencia de un título propio se mantiene y es el de la universidad que lo emite. Las ediciones realizadas son un buen indicador del valor que el mercado le concede objetivamente, entre otros criterios.
· El título propio certifica una etapa universitaria de formación de postgrado no doctoral.
· Son además la manifestación de la adaptabilidad del sistema educativo europeo general y del español en particular, que busca la individualidad de cada caso.
· En aquellos baremos, curriculum u hojas de vida laborales, otorgan un reconocimiento y valor de capacitación universitaria internacional.
· Dentro de nuestras fronteras, prácticamente todas las Comunidades conceden puntuación específica a los alumnos ya sea para oposiciones, concursos, bolsas de trabajo y traslados, siendo un matiz diferenciador objetivo en el reñido mercado laboral respecto a posibles competidores, siendo pues un elemento que incline la balanza hacia la concesión o no del ansiado trabajo o en la mejora del mismo.
· El alumno del título propio puede obtener esta especialización en un periodo comprendido entre 4 y 6 meses.
· Existe la posibilidad de realizar esta formación a distancia de forma completa, matiz muy valorado por el colectivo de salud en muchas áreas y para quienes no disponen de disponibilidad para otro formato.
· La gran variedad disciplinar es por tanto muy ágil, flexible y personalizada.
· Los títulos propios además, en los tiempos actuales y siempre, pueden hacerse a costos muy competitivos, compatibles con becas, fraccionamientos de pago y convalidaciones modulares.
· Estas titulaciones se adaptan a las necesidades individuales de quien desea mejorar, elija un máster universitario o un experto universitario estos van a ampliar y actualizar su formación sin afectar a su actividad laboral y personal ya que se pueden realizar a distancia o en formato online.
· Están orientados al mercado laboral, concreto y flexible, enfocados a la especialización individual y grupal mejorando las competencias profesionales actuales y futuras inmediatas.
2015 hará posible la consecución de esta realidad objetiva, otorgando a los máster títulos propios el espacio y reconocimiento que merecen y no solo sean un modelo español.
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