Foto: EUROPA PRESS
av2" class="NormalTextoNoticia" itemprop="articleBody">
ALICANTE, 2 Feb. (EUROPA PRESS) -
El alcalde de Alicante, Miquel Valor, ha anunciado este lunes que renuncia a seguir con la tramitación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) para "dejar a un lado controversias" a un proyecto que se inició hace 14 años y por cuya tramitación están imputados los ex primeros ediles de la ciudad Luis Díaz Alperi y Sonia Castedo, en una causa derivada del 'caso Brugal' en la que se investigan presuntos beneficios al constructor Enrique Ortiz.
El objetivo, según Valor, que ha realizado este anuncio en un comunicado, es "dar paso a un modelo de ciudad de crecimiento inteligente, sostenible medioambiental y territorialmente, incorporando la Infraestructura Verde y eficiencia energética".
Valor ha avanzado que se celebrará un pleno extraordinario para acordar el "desistimiento" y remitir la decisión a la Comisión Territorial de Urbanismo del PGOU en tramitación para el inicio de un nuevo plan. La redacción comenzará con la creación de unos talleres de participación pública "para que entre todos diseñemos el nuevo modelo de ciudad que queremos para Alicante".
El alcalde ha añadido que el Ayuntamiento de Alicante "quiere apostar por un urbanismo de vanguardia y, de este modo, poder optar a las nuevas líneas de financiación europeas".
APOYO DE FABRA
La decisión ha sido adoptada por el alcalde de Alicante "con el apoyo del presidente de la Generalitat Valenciana, Alberto Fabra, y tras una posterior reunión con la consellera de Infraestructuras, Isabel Bonig, y después de conocer la valoración técnica por parte de los máximos responsables de la Conselleria, con el fin de adoptar la mejor solución que permita encauzar el nuevo documento".
El director general de Evaluación Ambiental y Territorial de la Conselleria de Infraestructuras, Juan Giner, ha valorado "muy positivamente la decisión", que ha calificado de "muy inteligente, ya que el nuevo plan se podrá tramitar de acuerdo con la nueva ley urbanística, que entró en vigor el pasado 20 de agosto, recogiendo las últimas directrices de desarrollo de las normativas europeas".
DESESTIMACIÓN
Los plazos a partir de ahora, según el Ayuntamiento, comienzan tras el acuerdo adoptado en pleno. Desde ese punto será la Conselleria de Infraestructuras la que "deberá aceptar este desistimiento" para a continuación, desde el consistorio, iniciar "las actuaciones preparatorias de participación ciudadana, a través de talleres, encaminadas a redactar una nueva revisión del PGOU", ha indicado el alcalde. "Todo ello, me parece imprescindible para empezar una nueva etapa llena de ilusiones, para esta gran ciudad que es Alicante", ha especificado.
