La universidad recoge en una guía cómo prevenir este problema e implantar protocolos en los centros con una visión práctica
VALENCIA, 20 Oct. (EUROPA PRESS) -
Uno de cada cuatro escolares en España, un 23,4 por ciento de los alumnos de Primaria a Bachillerato, ha transmitido haber sufrido algún tipo de acoso en el colegio o estar siendo víctima de alguna conducta de este tipo en ese entorno. Así, lo ha indicado este jueves uno de los autores de la primera guía práctica preventiva frente al acoso escolar editada en este país, Óscar Cortijo, que ha destacado que este tipo de violencia hay que atajarla cuando se inicia y no cuando se ven las consecuencias porque "se ha llegado tarde".
Cortijo se ha pronunciado de este modo en la rueda de prensa en la que ha presentado este libro, titulado 'Cómo prevenir el acoso escolar. La implantación de protocolos antibullying en los centros escolares: una visión práctica y aplicada'. El autor ha explicado que este trabajo, que ha llevado a cabo junto a Iñaki Piñuel, es fruto de la experiencia recogida a partir de la aplicación del método y el plan que propone en diez colegios del CEU de toda España y la labor realizada con 7.000 alumnos desde Primaria hasta Bachillerato.
"El libro surge no de forma teórica sino como reflejo de la implantación real del protocolo en diez colegios del CEU, lo cual ha permitido contrastar de forma empírica los mecanismos" propuestos para detectar el acoso escolar, ha expuesto Cortijo, que ha apuntado que hay un "repunte importante" de estos casos en segundo de Primaria "al no estar bien asentada la moral" en esa edad.
El autor, director corporativo de Personas de los centros CEU España y responsable de Personas de la Universidad CEU Cardenal Herrera, ha comentado respecto al porcentaje de incidencia de la violencia escolar que ha ofrecido que puede "discrepar", al ser mayor, con los datos ofrecidos por "muchas estadísticas" porque éstas "consideran solo los casos cuando se ven las consecuencias y se habla de las secuelas y no todo el proceso desde que se inicia".
Óscar Cortijo ha resaltado que en este tipo de violencia "lo más grave es el acoso psicológico". Asimismo, ha advertido de que la conducta de acoso se extiende muchas veces más allá de un solo acosador y pasa a ser de un grupo hacia una víctima "de forma deliberada".
El experto, también vicedecano del Colegio Oficial de Psicólogos de la Comunitat Valenciana, ha expuesto que "el gran incremento en España de la violencia escolar es fruto de cuatro conceptos que han agravado la situación". En primer lugar, ha hablado de "la impunidad" y ha manifestado que "cuando no se frena esa violencia, ésta se alarga", además de afirmar que "la reiteración de la violencia genera los daños".
Como segundo concepto, ha citado "la banalización de la violencia" --ha enmarcado aquí el caso registrado recientemente en Palma de Mallorca-- y ha subrayado que no hay que pensar que "un insulto, un mote, una colleja o no dejar jugar en el patio a alguien son cosas de niños que se arreglan entre niños y que los mayores no se han de meter en ellas". "Eso es un error porque se deja sola a la víctima. Es necesario que los adultos y el centro escolar paren eso", ha aseverado.
Cortijo ha apuntado, en tercer lugar el "error de atribución", que lleva a "no a atribuir la conducta a los autores de la violencia sino al alumno que la sufre", achacándole "un déficit de atención" y diciendo que es "un niño raro". "Eso es un error gravísimo porque el problema lo crea quien emite el acoso", ha dicho. Finalmente, ha citado como cuarto concepto la "revictimización secundaria", poniendo "el foco en el niño acosado cuando el problema no está ahí".
"MIRAR A OTRO LADO"
El autor de la guía ha añadido que en "el crecimiento y la gravedad" de este tipo de hechos también influye la decisión de "mirar a otro lado". En este punto, ha lamentado que "no haya habido voluntad política" de mirar hacia este problema para combatirlo desde el inicio --así ha estimado "una medida reactiva y no proactiva el teléfono habilitado por el Gobierno para comunicar casos de acoso escolar ya que los recoge cuando ya han sucedido-- y que haya colegios que nieguen la existencia de estas conductas diciendo "aquí no, en mi centro no".
Óscar Cortijo ha subrayado la necesidad de atender estas cuestiones y de aplicar los protocolos y mecanismos que permitan medirlos porque "lo que no se mide no se puede gestionar". La guía incluye el "test TEBAE", que permite "la evaluación preventiva del riesgo de acoso escolar". "Es un cuestionario de mediación temprana, para que cuando veamos un conato podemos actuar de forma temprana", ha insistido, a la que ha reiterado la conveniencia de "cortar de raíz" los problemas y la necesidad "de medir".
Por otro lado, el psicólogo ha resaltado, la importancia de implicar en la lucha contra el acoso escolar "a todos los agentes escolares", así como de "formarlos" para detectar los casos y combatirlos. En esta línea, ha invitado a "trabajar de forma preventiva en las aulas" con medios como los que presenta la guía y con el fin de "poner el foco en los alumnos".
"DEBATE REFLEXIVO"
Respecto al trabajo en las aulas ha dicho que debe ser "tutorizado", a través de los profesores y de la información que recibirán para ello, y "generar un debate reflexivo" que lleve a que los alumnos indiquen "qué conductas no quieren sufrir en los colegios" y cuáles son "las actitudes que rechazan".
De este modo, los escolares "se implican en la solución del problema" y ayudan a frenar comportamientos "inadmisibles". Cortijo ha propuesto también que los alumnos propongan sanciones porque eso tiene "un efecto disuasorio y persuasivo". Ha rechazado soluciones como que el niño acosado abandone el centro escolar en el que sufre la violencia porque así "el acosador sale impune" y ha invitado a aplicar los protocolos preventivos, que puede hacerse "de forma poco costosa".
