ALICANTE, 31 Jul. (EUROPA PRESS) -
Agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil de Alicante se han incautado a lo largo de este mes de julio de 600 kilos de pescado fresco que carecía de las tallas o del peso mínimo reglamentario y que, además, carecía del etiquetado obligatorio para determinar su trazabilidad, según ha informado el Instituto Armado en un comunicado.
La operación, desarrollada en las lonjas de la provincia, se ha efectuado en el marco del operativo permanente relativo al Plan Anual de Comercialización e Inspección de Productos Pesqueros (PACIAP) contra la captura y el comercio de pescado inmaduro y al Plan Anual control Captura de Atún Rojo.
Dentro de las actuaciones llevadas a cabo por el Seprona de la Guardia Civil de Alicante, en las que se han realizado una serie de operativos orientados tanto al control del transporte como al de la comercialización y de las instalaciones de lonjas pesqueras de esta provincia, que ha generado la instrucción de 10 actas-denuncia y la intervención del pescado inmaduro, mayoritariamente de la especie merluza, pero también rape y pulpo.
Además, dentro del mismo PACIAP, en colaboración con el Servicio de Inspección de la Conselleria de Presidencia y Agricultura, Pesca, Alimentación y Aguas, se han localizado y denunciado dos partidas de atún rojo y otras especies, que no acreditaban mediante etiquetas u otros documentos comerciales, obligatorios para su correcta trazabilidad y captura.
Como resultado de estas actuaciones, se procedió a la intervención de cuatro ejemplares de Atún Rojo con un peso de 400 kilogramos. El pescado decomisado ha sido entregado a distintos centros benéficos de la provincia.
