Mutxamel tala por seguridad ocho pinos

Caída de un pino en Mutxamel
Foto: AYUNTAMIENTO MUTXAMEL
Actualizado: martes, 4 agosto 2015 12:21
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ALICANTE, 4 Ago. (EUROPA PRESS) -  

   El Ayuntamiento de Mutxamel (Alicante) ha decidido talar, por motivos de seguridad, ocho pinos carrascos de gran envergadura ubicados en el jardín pinada situado en el antiguo colegio El Salvador, según ha informado este martes el consistorio en un comunicado. Así, ha indicado que "la inclinación y las heridas de poda" de estos árboles "los hace muy peligrosos".

   Esta decisión se ha adoptado tras el incidente registrado el pasado 2 de julio cuando un pino de 18 metros de altura ubicado en este jardín pinada cayó sobre un vehículo. El siniestro no produjo heridos y sólo daños materiales dado que no había ninguna persona ni dentro del coche ni cerca.

   A partir de este suceso, el concejal de Servicios de Mutxamel, Rafael Pastor, solicitó dos informes para conocer la situación de estos árboles. Uno de estos trabajos ha sido realizado por la empresa que gestiona el mantenimiento de los jardines municipales y el otro por una empresa de jardinería ajena a los servicios municipales, ha precisado el Ayuntamiento.

   El consistorio ha señalado que "tras estudiar la viabilidad de los pinos y atendiendo principalmente al criterio de seguridad y estabilidad" con el fin de "evitar que se repitan incidentes similares y, especialmente, daños personales", ambos informes aconsejaban "la tala de ocho de los once pinos que actualmente hay en el jardín pinada".

   Rafael Pastor ha indicado que esta tala es "una decisión nada agradable" pero ha destacado que "por responsabilidad había que actuar" porque "debe primar la seguridad de los ciudadanos".

COPA DESEQUILIBRADA

   El Ayuntamiento de Mutxamel ha comentado que el informe técnico externo apunta, entre otras cosas, que "el problema principal que tenía el árbol caído, así como el resto de pinos del recinto, es que presentan un ramaje y distribución de la copa bastante desequilibrada y mal distribuida espacialmente".

   Así, expone que "el origen de este problema se remonta muchos años atrás, cuando se ha ido construyendo edificios de mayor altura que los árboles". Esta circunstancia ha hecho que los pinos, "al verse privados de parte de la luminosidad a la estaban acostumbrados, hayan ido creciendo desigualmente" y "alejándose de las fuentes de sombra" con la consiguiente "inclinación de los troncos por la distribución cambiante de peso".

   El informe detalla que "este tipo de crecimiento especial" lleva a que "un lado del tronco crece más que otro para reforzar el comportamiento mecánico de la madera donde más se necesita, empujando hacia arriba la copa solo por ese lado para que vaya buscando de nuevo la alienación vertical".

   Igualmente, recoge que "las intervenciones de poda que se han realizado a lo largo de los años en el árbol no han sido siempre acertadas" y que presenta "multitud de heridas de poda y tocones".

RECOMENDACIONES

   Con todo, el informe recomienda la tala para ocho de los once pinos; para otro, hacer seguimiento durante un periodo de dos años con el fin de comprobar la respuesta del árbol a los anillamientos, así como marcar las grietas, medir periódicamente la inclinación y talar si se observa evolución negativa en cualquiera de los parámetros; y para otros dos, realizar una poda de descarga.

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