El artista regresa con esta muestra a València: "Es un placer encontrarte con el progreso y con una ciudad que tanto ha mejorado"
VALÈNCIA, 28 Jun. (EUROPA PRESS) -
Una serie de seis cabezas monumentales del artista Manolo Valdés (València, 1942) se ha instalado en el lago de la Ciudad de las Artes y las Ciencias de la ciudad del Turia para "hacer soñar". Las piezas podrán contemplarse hasta el próximo 10 de diciembre, momento en el que cinco de las obras serán trasladadas a Singapur y una --la que elija el público mediante votación-- permanecerá en la ciudad, concretamente en La Marina.
Así se ha destacado este miércoles en la rueda de prensa de presentación de la exposición, en la que han participado el propio Manolo Valdés; la directora de la Fundación Hortensia Herrero --entidad que patrocina el proyecto y que donará a la ciudad la escultura elegida por los ciudadanos--, Elena Tejedor; el director de la Ciudad de las Artes y las Ciencias, Enrique Vidal; y el comisario de la selección, Javier Molins.
Esta exposición temporal cuenta con las seis esculturas que compusieron la muestra en la Place Vendome de París y que llevan los títulos de 'La Mariposa', 'Los Aretes', 'La Diadema', 'Mariposas', 'La doble imagen' y 'La Pamela'. Esta noche se abre el plazo para que los ciudadanos voten la obra que les gustaría se quedase en València a través de las nueve urnas que se repartirán por el espacio expositivo.
Valdés, que regresa con esta muestra a su lugar de nacimiento, ha expresado que "es un placer encontrarte con el progreso y con una ciudad que tanto ha mejorado". A este respecto ha comentado que cuando estudiaba Bellas Artes "solo había una pequeña galería, ahora tenemos el IVAM, tenemos tantas cosas que hacen que la gente que empieza tenga más posibilidades y esté más preparada, tienen mucha suerte", ha añadido.
El escultor se ha referido a las obras monumentales como a "una continuación de su trabajo" que, como es habitual en su producción, "hacen referencia a otros artistas". En este caso, las cabezas "hablan de Matisse".
PRIMERA VEZ SOBRE AGUA Y PINTADAS
En esta ocasión, es la primera vez que Valdés expone sobre el agua y también que pinta sus esculturas. La idea de exponer sobre una lámina de agua le ha resultado positiva y ha asegurado que tuvo una fase en la que creía que la Place Vendome iba a ser el mejor sitio del mundo, "ahora el mejor sitio del mundo es el agua".
"A partir de ahora será sobre el agua siempre que pueda. Cuento esto porque el lugar donde estarán puestas te hace pensar, te hace soñar", ha explicado.
Respecto a la idea de pintarlas, Valdés reconoce que "viene en el fondo de la influencia de otros". "Cuando he visto la gente que viene después, que pinta sus esculturas pues algo ha influido sobre mi", ha explicado. El escultor ha decidido pintarlas de los colores que habitualmente utiliza, como el azul, que es "el que más me interesa".
Asimismo, investigó los materiales, puesto que "la pintura al aire libre no suela resistir". "Luego pasé a las blancas, por los reflejos, pero eso no quiere decir que vaya a abandonar el color de los metales", ha asegurado.
En esta línea, el artista ha explicado que "hay polémica sobre ponerle color a una escultura", pero desde su punto de vida pintarlas "ayuda a poner sobre ellas algo tuyo, de quien las tiene, en este caso de la gente de aquí de la Ciudad de las Artes y las Ciencias", ha apostillado.
"MARIPOSAS EN TODAS PARTES"
Valdés ha explicado que nunca sabe cuándo una idea entra o sale de su cabeza y, en el caso de las mariposas, que decoran una de estas piezas de gran formato, las vio revoloteando sobre la cabeza de alguien y pensó "qué bonito". Y a partir de ese momento vio mariposas "en todas partes", ha señalado. "Te das cuenta de cuánta gente las ha pintado, cuánta gente las lleva en el cuerpo y a partir de ahí entras con ese reto a hacer la escultura", ha aseverado
Por su parte, el comisario de la muestra, Javier Molins, ha subrayado que Valdés "mira la historia del arte, es un artista que dialoga con el pasado".
"Estas esculturas no dejan de ser eso, un diálogo con el pasado, esas cabezas tendrían trazos de uno de sus grandes referentes que es Matisse, son cabezas matissianas con esos rasgos de ojos achinados que podemos ver sin mucha definición pero que en este caso acompaña de unos complementos más contemporáneos", como una pamela vista en Miami, las mariposas de Central Park, o los helechos en sus exposiciones del Jardín Botánico de Nueva York".
PIONERO CON LA DAMA IBÉRICA EN NUEVA YORK
Molins ha hecho notar además que Valdés ha sido "pionero en sacar el arte a la calle", puesto que ya lo hizo en 2002 cuando instaló una Dama Ibérica en Nueva York, donde también ha expuesto en el Jardín Botánico con siete esculturas que dialogan "con árboles centenarios".
En esta ocasión ha roto "su gran idilio" con Nueva York y París para conversar con Santiago Calatrava y sus edificios en la Ciudad de las Artes y las Ciencias. "La otra gran novedad es que dialoga con un espacio creado por otro creador contemporáneo, es la primera vez que las esculturas de Manolo dialogan no con un entorno de naturaleza o con la arquitectura clásica, aquí habla de tú a tú con la arquitectura de un creador contemporáneo que es Santiago Calatrava", ha detallado Molins.
Sin embargo, Molins ha destacado que "no hay que verlo como un pulso sino como que las dos obras se ayudan, suman y una ayuda a la otra, el edificio a las esculturas y las esculturas a dotar de vida este lago".
En este sentido, el propio Valdés ha apuntado que "la escultura y la arquitectura siempre han ido de la mano . "Espero que él (Calatrava) no esté enfadado; yo estoy feliz", ha apostillado.
Por su parte, Vidal se ha referido a la muestra como "una oportunidad histórica" para los ciudadanos, "poder dialogar con Valdés y Calatrava". Asimismo, Tejedor ha animado a todos el mundo "a venir durante dos momentos del día, porque las obras muestran una personalidad totalmente diferente", de noche y de día.
