VALLADOLID, 6 Oct. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Educación, Ángel Gabilondo, hizo un llamamiento al conjunto de la sociedad para perseguir el objetivo "conjunto" y "muy exigente" de reducir el abandono escolar al 15 por ciento en el año 2020.
Gabilondo se expresó así en la inauguración del I Congreso Nacional de Abandono Escolar que se desarrolla hasta el viernes en Valladolid, donde estuvo acompañado por el consejero de Educación de Castilla y León, Juan José Mateos, quien destacó la importancia de este encuentro sobre "uno de los problemas más cruciales" de la educación en España.
Por suparte, el ministro aclaró que "técnicamente" el abandono escolar incluye a los chicos de entre 18 y 24 años que no han continuado los estudios más allá del Graduado en Educación Secundaria --mínimo exigible en España-- y situó esta tasa en un 31,2 por ciento (un 26 en el caso de Castilla y León).
A este respecto, recordó en la Unión Europea se ha fijado como objetivo en 2020 llegar a una media del 10 por ciento y, en el caso de España, un 15 por ciento, ya que cada país tiene una meta debido a que se parte de situaciones y circunstancias diferentes.
Gabilondo aseguró que es un "objetivo muy exigente" y añadió que hacen falta unos años para analizar el abandono escolar, no se pueden tomar cifras anuales, por lo que reiteró su llamamiento para lograr su reducción. "La educación en España si quiere ser de excelencia y quiere ser equitativa tiene que lograr que como máximo haya un 15 por ciento de abandono", dijo el ministro, quien manifestó su esperanza de que se alcance.
El titular de Educación incidió en que se trata de un objetivo compartido, estatal, y enmarcó el Congreso que inauguró en una iniciativa para intentar buscar las razones y condiciones del abandono con el fin de abordarlo, ya que se trata de unos de los "problemas fundamentales" del ámbito educativo.
DIFERENTES CAUSAS
Además, explicó que no sólo tiene raíces en la escuela, sino también sociales, del modelo estructural, que "desbordan las actividades educativas" y por ello aseguró que le anima "enormemente" el hecho de que 350 congresistas de distintos ámbitos con responsabilidad en la educación debatan sobre este asunto.
"No hay futuro social ni económico si no se abandona este asunto", dijo Gabilondo, quien concretó que el mapa del abandono "enseña muchas cosas" y demuestra que ésta circunstancia no depende de colores políticos, sino que requiere un análisis más complejo que tiene que ver con el modelo de producción, la configuración social.
Aunque considera que no es indiferente a las políticas educativas, insistió en que frente a este asunto hay que trabajar "juntos", de distintos ámbitos "con un objetivo de Estado que es adoptar medidas y programas para hacerlo".
En este sentido, explicó que el Plan de Acción Educativa 2010-2011 también busca este consenso con las comunidades autónomas y la lucha contra el abandono, por lo que pidió a todos que "cooperen a través del acuerdo y el consenso para encontrar las raíces y las razones".
Asimismo, el ministro aprovechó para recordar que ha pedido al secretario general de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), Ángel Gurría, que se deberían analizar "con seriedad" los parámetros con los que se mide el abandono escolar en toda Europa porque no siempre son conmensurables, ni siquiera homogéneos.
Tras aclarar que no se pretende cambiar los métodos para que las estadísticas sean favorables, indicó que se trata de homogeneizar los mismos, ya que existe un debate sobre si lo que importan son los títulos o la escolarización, por ejemplo.
TASA DE ESCOLARIZACIÓN
Frente a este abandono escolar de un 31,2 por ciento que se cifra en España, Gabilondo también aseguró que "hay algunas buenas noticias", ya que en España el 80 por ciento de los jóvenes de 16 a 19 años está escolarizado, por lo que hay tasas equivalentes a la OCDE.
"Tenemos datos positivos que nos indican que vamos en la buena dirección", dijo el ministro, quien se comprometió a que las conclusiones que se adopten en el Congreso se analizarán "muy en serio" para ver cuál es su viabilidad para mejorar el sistema educativo español.
En este contexto, en respuesta a preguntas de los periodistas, el titular de Educación rechazó que la situación de abandono sea una consecuencia de la Ley Orgánica de Ordenación General del Sistema Educativo (Logse) y afirmó que las familias españolas valoran cada ver más la educación.
Tras abogar por que la educación sea "el mejor legado" de las familias incidió en que hay conciencia de qué esto es así, como a su juicio demuestran las 7.747.253 personas en educación no universitaria, con un incremento de más de 160.000 estudiantes, o por qué en el ámbito universitario hay 1,6 millones, un incremento de más del 10 por ciento con respecto al año anterior y la Formación Profesional tiene un 6,4 por ciento más dfe alumnos.
"Todo el país sabe que si no hay educación no hay futuro personal ni vinculado a la empleabilidad", dijo Gabilondo, quien aclaró que no quiere "satanizar" leyes, sino "al revés", cree que "pueden cambiar todas las leyes del país, todos los gobiernos del país y todos los ministros" que lo determinante es también el profesorado, la comunidad educativa, la implicación de las familias y el papel de los centros.
En este sentido, afirmó que en la misma comunidad, entre centros próximos o en uno mismo hay resultados diferentes, algo que considera que tiene que ver con la motivación del profesorado. "Es difícil que una ley haya podido producir una situación como en la que estamos", aseguró.
Por el contrario, cree que en un momento dado se pensó en España que había que pasar pronto al trabajo para ganar un "dinero rápido" en época de bonanza, pero ahora se ve que ante dificultades económicas hay mucha gente joven sin preparación, estudios, sin posibilidades de reinsertarse en el mercado laboral, que pide cualificación. "Éste es el desafío para el país, la gente joven que quizá no tiene preparación y necesita reinsertarse en la formación, la causa no es la Logse", dijo.
