Los mejores discos debut de todos los tiempos (2)

Los mejores debuts (2)
Los mejores debuts (2) - EUROPA PRESS
Actualizado: miércoles, 22 noviembre 2017 17:24

MADRID, 1 Nov. (EDIZIONES - David Gallardo) -

   Repasábamos en la primera parte de este artículo una decena de discos debut que han pasado a la posteridad como los más emblemáticos entre el infinito pelotón de primeros trabajos que llegan al mundo diariamente desde que existe la música grabada.

   Guns n' Roses, Led Zeppelin, The Doors, Pearl Jam, Rage Against the Machine y Ramones fueron algunos de los ilustres nombres que recordamos en ese reportaje iniciático, que tiene ahora continuación con una segunda parte de nuevo con otra decena de debuts absolutamente demoledores.

   No se trata de que sean los mejores álbumes de estos artistas, sino de que realmente consiguieran sorprender a propios y extraños al aparecer desde la nada y lograr un impacto contundentemente sonoro en la cultura popular de nuestro tiempo. Más o menos eso hicieron los mencionados y los siguientes:

THE STONE ROSES (1989)

   El grupo comandado por Ian Brown y John Squire es considerado fundamental en la música británica por la influencia que su debut tuvo en lo que terminó siendo el fenómeno del britpop durante la primera parte de los años noventa. Lanzado en abril de 1989, el álbum contiene el clásico I wanna be adored, que incluso es citado en la letra del tema Magic Pie de Oasis, banda que, efectivamente, les adora.

OASIS (1994)

   Popularizaron el britpop en todo el mundo irrumpiendo como un elefante en una cacharrería, comandados por el desafiante carisma de macarras de barrio (de Manchester, concretamente) de los hermanos Liam y Noel Gallagher. Definitely Maybe es una sucesión de himnos como Live forever, Columbia, Supersonic, Cigarettes & Alcohol o Slide Away, que les convirtieron en clásicos instantáneos, ahora separados por las trifulcas entre el par de dos.

METALLICA (1983)

   Con su debut Kill 'Em All, Metallica llevaron el thrash metal a desconocidas cotas de popularidad, influyendo salvajemente en multitud de formaciones posteriores con ese frenesí guitarrero de descomunal pegada rítmica. El álbum vendió 17.000 copias en sus dos primeras semanas, pero ahora acumula ya más de 3 millones con trallazos salvajes como The four horsemen, Motorbreath, Whiplash, Hit the Lights, Metal Militia y Seek and Destroy.

THE CLASH (1977)

   En plena eclosión punk, The Clash debutaron meses antes que Sex Pistols con una propuesta ya inicialmente variada que también incluía reggae, dub e incluso pop. La banda invirtió 4.000 libras y tres semanas en una grabación que se encaramó al puesto 12 de las listas de ventas inglesas con canciones ahora clásicas como White riot, London's burning, I'm so bored with the USA, Remote Control o Career oportunities. La leyenda de Joe Strummer y los suyos no había hecho más que empezar.

BLACK SABBATH (1970)

   La hercúlea guitarra de Tony Iommi en el primer tema del disco (llamado Black Sabbath, también como todo el trabajo) sigue pesando varias toneladas 45 años después, manteniendo intacta su capacidad para aplastar infieles.

   La banda inglesa, también con Ozzy Osbourne, Geezer Butler y Bill Ward, es un pilar fundamental de lo que terminaría siendo el heavy metal junto a Led Zeppelin y Deep Purple. Solo por eso y por otros temas como N.I.B., The wizard o Evil woman, este disco es esencial en la historia de la música.

THE VELVET UNDERGROUND (1976)

   El músico y productor Brian Eno (nada que ver con el grupo) declaró en 1982 que puede que este disco solo vendiera 30.000 copias tras su lanzamiento, pero "todos los que lo compraron comenzaron una banda". Sirva esta reflexión para ejemplificar la infinita influencia que Lou Reed, John Cale, Sterling Morrison y Maureen Tucker ejercieron sobre sus contemporáneos y sobre los que vinieron después.

   Su mánager Andy Warhol les otorgó el toque absolutamente arty y les sugirió contar con la vocalista alemana Nico... y así este debut terminó llamándose The Velvet Underground & Nico.

THE STOOGES (1969)

   Proto-punk a raudales desde Detroit hacia el resto del planeta por cortesía de Iggy Pop, Ron Asheton, Dave Alexander y Scott Asheton, quienes perpetraron un furibundo debut con pildorazos absolutamente adelantados para la época como I wanna be your dog y No fun.

   Demasiado bruto para 1969, el disco no fue un éxito en la época debido a su bronco y atronador pálpito, pero el tiempo le ha colocado en el lugar destacado que merece.

THE POLICE (1978)

   Lanzado en noviembre de 1978, Outlandos d'Amour aglutina una parte de la fiereza punk de la época (convenientemente encauzada para las masas) fusionada con un evidente gusto por las melodías pop de los sesenta (algo en realidad común a muchas bandas punks).

   Así fue como Sting, Andy Summers y Stewart Copeland facturaron un debut que es una sucesión incansable de singles potenciales: Next to you, So lonely, Roxanne, Hole in my life, Can't stand losing you, Born in the 50's... con una frescura pasmosa, contagiosa y adictiva, como si fueran los primos inofensivos de The Clash.

THE STROKES (2001)

   La banda The Strokes fue recibida como la nueva gran esperanza del rock neoyorkino, con constantes e inevitables comparaciones con The Velvet Underground debido a un sonido tan simple y clásico como poderoso, que bebía también del garaje rock más bravío, sin olvidarse de las siempre resultonas melodías poperas.

   El resultado es un trabajo de esos que marcan generaciones con himnos como The modern age, Barely legal, Last nite, Hard to explain y New York City Cops. Nunca se han superado.

ARCTIC MONKEYS (2006)

   La que se montó cuando salió Whatever People Say I Am That's What I'm Not no la recuerdan a estas alturas ni los más viejos del lugar, pero realmente Alex Turner y compañía revolucionaron el panorama musical inglés como solo los más grandes hicieron antes que ellos. En el primer día de lanzamiento, se convirtió en el debut que más rápido se ha vendido en la historia del rock británico, con alrededor de 120.000 copias.

   A finales de la semana, había despachado 363.735 copias, más que el resto del top 20 de álbumes más vendidos combinados. Han pasado casi diez años y el grupo, efectivamente, se ha consolidado como enorme (y sigue creciendo).