Heurtel (FC Barcelona Lassa) Facundo Campazzo (Real Madrid)
ACB PHOTO - Á. MARTÍNEZ
Actualizado: sábado, 17 febrero 2018 22:53

El campeón blanco busca su quinto título seguido ante un Barça resucitado por Pesic

LAS PALMAS DE GRAN CANARIA, 17 Feb. (Del enviado especial de Europa Press, Rodrigo Trascasa) -

Real Madrid y FC Barcelona protagonizan este domingo (18:30 hora peninsular/#0) la final de la Copa del Rey de Gran Canaria 2018, un Clásico para poner la guinda a cuatro días de batalla, con el campeón blanco dispuesto a levantar su quinto trofeo seguido, ante un rival con sed de títulos y recuperado en lo anímico y deportivo de la mano de Svetislav Pesic.

Las Palmas no deparó sorpresas en una final de gigantes, como hace tres años, ambos rompiendo el sueño canario. El Madrid se deshizo (59-77) de Iberostar Tenerife y el Barça, de Herbalife Gran Canaria (74-87). Los dos equipos más laureados del torneo cara a cara una vez más por el título. El Barça llega lanzado como hacía tiempo, con el efecto Pesic insuflando la confianza que necesitaba un equipo que por nombres estaba muy por debajo del nivel esperado.

El técnico serbio está a un partido de confirmar su condición de talismán azulgrana, después de una primera etapa en la que logró un histórico triplete en 2003 (Copa, Liga y la primera Euroliga del club). Gloria debajo del brazo parece llevar Pesic con el Barça, a pesar de que el equipo agonizaba cuando hace una semana tomó las riendas. La cita copera demostró una vez más que no entiende de rachas ni momentos, aunque esta vez sí respetó la historia.

La que dice que Madrid y Barça son siempre favoritos. El Madrid tiene en su mano estirar su leyenda en el torneo del K.O., a por una racha que ya hizo histórica con el tercero y ahora busca el quinto. Los de Pablo Laso siguen sin explotar en Las Palmas. Después de sufrir hasta el último minuto contra Unicaja, tiraron media parte ante Iberostar, para sentenciar a medio gas.

La Copa además es el último título que ganaron los blancos, el año pasado en Vitoria, tras caer en la final de liga ante el Valencia Basket y en Euroliga contra el Fenerbahce la temporada pasada. En hambre sin embargo debería ganar el Barça, que acumula una sequía de cuatro años sin un título grande, la liga de 2014 (ganó la Supercopa en 2015).

Un periplo de penuria y quema de proyectos, desde el último año en blanco de Xavi Pascual hasta el fin de Sito Alonso a una semana de esta Copa -pasando por Georgios Bartzokas--. Tres años de tocar fondo con actuaciones sin alma ni baloncesto que están a un partido de abrir un claro. Despejar la panza de burro, que diría uno de Las Palmas en verano, y recuperar autoestima.

Para echar al anfitrión del Gran Canaria Arena, el Barça repitió el guion de cuartos ante Baskonia. La resurrección con Pesic tiene a Heurtel como director de orquesta, bien rotado por Ribas. Además, el cuadro catalán goza de la agresividad que pretendía con la llegada en verano de Oriola y Hanga. Confianza y miedo espantado para citarse ahora con el eterno rival, un Madrid indomable en Copa.

FICHA TÉCNICA:

--EQUIPOS:

REAL MADRID: Campazzo, Doncic, Rudy, Taylor y Tavares --posible quinteto titular-- Causeur, Carroll, Reyes, Thompkins, Randolph y Ayón.

FC BARCELONA LASSA: Heurtel, Hanga, Sanders, Moerman y Tomic --posible quinteto inicial--; Navarro, Ribas, Oriola y Claver.

--PABELLÓN: Gran Canaria Arena.

--HORA: 17:30 (18:30 hora peninsular)/#0.

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