MADRID, 6 Jul. (EUROPA PRESS) -
El ciclista británico Chris Froome (Sky), nuevo líder del Tour de Francia tras la disputa de la tercera etapa, ha reconocido que "no esperaba liderar la carrera tan pronto", al tiempo que señalado que "es una sensación increíble volver a vestir el amarillo después de la decepción del año pasado", cuando tuvo que abandonar.
"No puedo estar más contento. Es una sensación increíble volver a vestirme de amarillo después de la decepción del año pasado. No esperaba liderar la carrera tan pronto. Tampoco sé hasta qué punto se puede interpretar una carrera en base a una subida de un kilómetro, pero es estupendo poder estar donde estoy en lugar de tener que recuperar tiempo sobre mis rivales", analizó Froome en declaraciones facilitadas por la organización.
El ganador del Tour en 2013 aclaró que "el maillot amarillo no es ninguna losa", sino el "lugar perfecto desde el cual afrontar el pavé" que espera en la cuarta etapa de este martes.
"Va a subir el nivel del equipo. Me enfrentaré a la etapa del pavé del mismo modo que los me he enfrentado a las primeras. Empezamos de cero en cada etapa hasta llegar a la montaña y, simplemente lo hacemos lo mejor posible cada día. Estoy contento de que, desde fuera, haya parecido que estaba tranquilo porque en realidad todo el mundo estaba muy nervioso. Los equipos intentaban trabajar para sus líderes y posicionarse es una gran batalla", concluyó.
