MADRID, 7 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Liga de Fútbol Profesional (LFP) apuntó este miércoles que ha enviado un nuevo informe a la Comisión de Antiviolencia y al Comité de Competición por insultos en el Sánchez Pizjuán en el Sevilla-FC Barcelona del pasado sábado, pero subrayó que el club hispalense ha "desarrollado e implementado" medidas para combatir la violencia en su estadio.
Así, el organismo recalca que el conjunto andaluz ha puesto en marcha "un nuevo paquete personalizado de medidas encaminadas, específicamente, a la prevención de la violencia" y que estas se están llevando a cabo "tanto en los días previos, como durante el desarrollo del partido".
"Se trata de una campaña con un mensaje claro, contundente e inequívoco de la línea marcada por el club en relación al
rechazo de los insultos en el fútbol. Especialmente, se ha de resaltar que en el partido inmediatamente anterior no se habían detectado incidencias en este sentido", añadió la LFP.
Entre estas medidas acreditadas, resalta la campaña 'Cordiality', que "contiene numerosas acciones en prevención de la violencia, el
racismo y la xenofobia en el entorno del fútbol bajo el lema 'Animar no es insultar. Insultar no es animar', apoyada por cuñas de radio y spot de tv en los medios oficiales, reparto de octavillas en el estadio, mensajes en la web o redes sociales, tanto antes como durante el partido.
Además, el Sevilla publicó sus medios oficiales "diversos mensajes para concienciar a sus aficionados" a 'Animar sin insultar', mientras que se está encargando de realizar "un exhaustivo registro de
pertenencias" para que no entren al recinto "lemas intolerantes y materiales prohibidos" y ha puesto en diferentes zonas y vomitorios del estadio la palabra 'Cordiality'.
"En aras a la prevención de cualquier tipo de incidencia que afectara a la seguridad del evento, el Sevilla dispuso un operativo de 240 vigilantes de seguridad privada y de 85 auxiliares", sentencia la LFP.
De todos modos, el organismo que preside Javier Tebas enviará un escrito de denuncia a Antiviolencia y Competición por los insultos realizados al colegiado Gil Manzano tras la señalización del penalti que dio lugar al 2-1 y que se produjeron "exclusivamente" desde donde se ubican habitualmente el grupo 'Biris Norte'.
"Se ha de destacar que el comportamiento de los espectadores presentes en el estadio fue correcto en líneas generales, dentro de la rivalidad y trascendencia intrínseca al propio partido y nivel de ambos contendientes", advierte el comunicado de LaLiga.
Por su parte, José Castro, presidente sevillista, se refirió a estas actitudes este martes en los Desayunos Deportivos de Europa Press. "Con la política de tolerancia cero de LaLiga hemos redoblado nuestro esfuerzo para que todos nuestros aficionados puedan animar sin insultar al contrario. Está costando, pero lo vamos logrando con talante", señaló Castro.
