Tarragona reafirma la "solvencia económica" de los Juegos Mediterráneos

Josep Felix Ballesteros, Alejandro Blanco  y Ramón Cuadrat
COE/ NACHO CASARES

Los responsables han rebajado el presupuesto de 150 a 90 millones y prevén ingresar 1,8 en 2014 en patrocinio privado

MADRID, 3 Feb. (EUROPA PRESS) -

El presidente del Comité Olímpico Español (COE), Alejandro Blanco, y el alcalde de Tarragona, Josep Félix Ballesteros, subrayaron este lunes la "solvencia económica" de los Juegos Mediterráneos de 2017 a pesar de la crisis económica y dijeron que éstos avanzan "a buen ritmo" dentro de la "austeridad" y "sostenibilidad" del proyecto de inversiones y deportivo.

"Tarragona 2017 avanza a buen ritmo. Lo hacemos en un entorno que no es fácil, en el que las premisas son las de la austeridad y sostenibilidad, pero sin perder de vista el cumplimiento del programa deportivo y la excelencia", comentó el alcalde de Tarragona en el COE, tras la primera reunión del Patronato en la sede de dicho organismo.

En este sentido, Josep Félix Ballesteros señaló que, en estos momentos de dificultades, "cuesta más concretar" las cosas relativas al presupuesto, pero recordó que en la fase de candidatura el Gobierno, la Generalitat y la Diputación de Tarragona firmaron una serie de garantías que se deben cumplir.

"Cómo se concretan y en que periodificación es en lo que estamos. A pesar de las dificultades. Tarragona progresa adecuadamente", indicó el alcalde, que admitió que "hubo un lapso de tiempo" en el que la 'arquitectura jurídica' -finalmente en forma de 'Fundación', aprobada en diciembre pasado- "tenía dudas".

Por otro lado, aseguró que el Comité Internacional de los Juegos Mediterráneos (CIJM) hizo una "valoración muy positiva" en su última visita por el "nivel de cumplimiento" de los objetivos que se habían marcado y destacó la importancia que tendrá la consideración, a partir del 1 de enero pasado, de 'acontecimiento de excepcional interés público', por los beneficios fiscales -hasta el 90 por ciento- que obtendrán las marcas colaboradoras.

Asimismo, el primer edil tarraconense, quien anunció que este martes mantendrá una reunión con los responsables de las federaciones nacionales, dijo que se ha adelantado "mucho" en el tema del voluntariado, con cerca de 1.500 inscritos y la firma con el Servicio Catalán de Empleo para que éstos tengan acreditada su formación para mejorar sus CV o "empleabilidad".

"NADIE NOS PREGUNTADO POR LA CUESTIÓN SOBERANISTA".

Acerca de la 'cuestión soberanista', Ballesteros afirmó que no ha habido pregunta alguna por parte del CIJM. "Estoy preocupado como ciudadano de Cataluña, pero nadie del CIJM nos ha planteado nada de la cuestión soberanista. Ni como duda ni que vaya a ser un obstáculo o piedra en el camino. En ningún momento nos preguntaron, ni de manera formal ni semioficial", recalcó.

Igualmente, confesó que preguntó al CIJM sobre si el proyecto de Juegos Europeos podría suponer una traba para los Juegos Mediterráneos. "La respuesta es que confían en Tarragona para levantar los Juegos Mediterráneos y que el proceso para 2021 seguía en marcha", manifestó.

El presupuesto de Tarragona 2017 se rebajó de los 150 millones previstos en el programa de candidatura hasta los 90 millones actuales, dado que no se construirá el estadio del Nástic (30 millones) y se reformarán pabellones en lugar de construirlos. "Se ha priorizado la reforma en lugar de la construcción", explicó el Director General de Tarragona 2017, Ramón Cuadrat.

De esos 90 millones, 47 millones corresponden a inversiones, sufragadas con dinero público (Gobierno, Generalitat, Diputación y Ayuntamiento) y 43, al presupuesto operativo, cuyo 76 por ciento se estima que se cubrirá con el apoyo de empresas privadas. En 2014, se prevé ingresar 1,8 millones en patrocinio privado, que irá incrementándose de forma gradual hasta la celebración de los Juegos.

La Villa Mediterránea se sustituirá por hoteles de Salou para no comprometer a la ciudad a llevar a cabo una inversión "que quede obsoleta o sin salida", argumentó Ballesteros. "No queríamos tener un legado que suponga un lastre para la ciudad y la organización. Eso el CIJM lo valora muy positivamente porque están muy preocupados por que los Juegos dejen un legado que sea difícil de asumir", desveló.