MADRID, 4 Sep. (EUROPA PRESS) -
El tenista suizo Roger Federer y el escocés Andy Murray se metieron con diferentes sensaciones en la tercera ronda del US Open, cuarto y último 'Grand Slam' de la temporada, después de que el de Basilea arrollase al belga Steve Darcis (6-1, 6-2, 6-1) y el de Dunblane sufriese ante el francés Adrian Mannarino (5-7, 4-6, 6-1, 6-3, 6-1).
El exnúmero uno del mundo continúa con paso firme y dispuesto a volver a dominar en Nueva York siete años después de su quinto y último título, encadenados todos ellos de forma consecutiva de 2004 a 2008. De momento, en sus dos primeros partidos, ha mostrado un alto nivel de juego que intentará mantener ante un rival más peligroso como el alemán Philippe Kohlschreiber, su obstáculo para llegar a los octavos de final.
Federer empleó una hora y veinte minutos para deshacerse de Darcis, aquel jugador que dio la sorpresa en Wimbledon en 2012 cuando eliminó al español Rafa Nadal, pero que no tuvo ninguna opción ante el segundo cabeza de serie, demoledor en su tenis, avalado por su saque (11 'aces'), su poderoso 'drive' y su habitual buen hacer en la red.
El jugador suizo se fue hasta los 45 golpes ganadores y tan sólo concedió al belga una bola de 'break' en todo un partido en el que sólo pudo ir por delante en el marcador tras hacerse con el primer juego.
En cambio, Andy Murray tuvo muchos más problemas para superar la segunda ronda y tuvo que remontar una desventaja de dos sets para acabar con las opciones del francés Adrian Mannarino, que no pudo contener la reacción del escocés, que únicamente cedió cinco juegos más.
El jugador zurdo le puso en muchas complicaciones al británico desde el inicio, con un juego muy agresivo, que le permitió dominar y acercarse a una de las mayores sorpresas del torneo. Así, dos 'breaks' en los compases finales de las dos primeras manga le puso por delante de forma clara.
Pero a partir de ahí, el ganador del Masters 1.000 de Canadá encontró las respuestas, empezando por su saque, que blindó, impidiendo que Mannarino gozase de ninguna oportunidad de rotura en el resto del encuentro.
El francés dejó de sumar ganadores y la mayor regularidad del escocés le permitió recuperar todas sus opciones. Tras ganar fácilmente el tercero, elevó su confianza y su rival ya no le pudo contener. El brasileño Thomaz Bellucci será su siguiente oponente camino de los octavos.
Finalmente, el suizo Stanislas Wawrinka también superó la segunda ronda con cierto trabajo, aunque no perdió ninguna manga en su choque ante el joven surcoreano Hyeon Chung. El de Lausana, que sumó 26 saques directos, solventó el partido gracias a su pericia en los tres 'tie-breaks' que decidieron los tres sets, y ahora se medirá al belga Ruben Bemelmans.
