EDIZIONES, 17 Oct.
Heinze Sánchez, un joven de 27 años, se encontraba sentado en una calle de Río de Janeiro consultando tranquilamente su móvil. En un momento dado, un perro se le acercó por detrás y comenzó a olerle. Después de un rápido chequeo, el animal se preparó para orinarle encima sin que el joven se diera cuenta de lo que ocurría a sus espaldas hasta que ya fue tarde.
En cuanto notó el orín en su espalda, Sánchez se levantó como un rayo para que el animal no continuara manchándole. Su primera reacción fue la de ir a por él, lanzando una patada que, por suerte para el cánido animal, solo dio al aire. En el vídeo se ve a Sánchez cómo se quita la camiseta y se va, enfadado, con el perro.
Pero la historia no acaba aquí. Mientras que cualquier persona querría olvidar lo que le ocurrió, Sánchez fue al mismo sitio al día siguiente en busca del perro y no para regañarle o hacerle daño, sino para llevárselo a casa y adoptarlo.”Lo busqué por el vecindario preguntando si tenía dueño. Cuando lo encontré le llamé y vino contento moviendo la cola y decidí llevármelo” aseguró Heinze a Extra.Globo.
El vídeo se ha convertido en un fenómeno viral y se ha criticado vivamente a Sánchez por su primera reacción de intentar pegar al pobre animal. “Encogí la pierna. Fue una reacción en el momento, no quería hacerle ningún daño” explicó.
El perro ha sido rebautizado como Enzo. “Lo he llamado Enzo porque siempre dije que cuando tuviera un hijo lo llamaría así” dijo Sánchez. “Es un perro bastante dócil, permanece siempre a mi lado, y llora cuando tengo que irme de casa. Es un buen perro” concluyó el nuevo dueño de Enzo.
Una curiosa forma de encontrar dueño, ¿no te parece? Casi igual de curiosa como la que encontró otro perro brasileño: se coló en una boda y se puso a descansar en el velo de la novia. ¿Qué tendran estos perros brasileiros que son más listos que el hambre?
