EDIZIONES, 6 Abr.
El pasado 4 de abril se jugó el partido de fútbol que enfrentó al Aberdeen frente al Inverness, correspondiente a la jornada 31ª de la liga de escocesa. Durante el encuentro se produjo una ocasión de gol marrada que es difícil de entender cómo un jugador profesional de fútbol pueda hacer cosa semejante.
La jugada ocurrió así: El Invernes intentó sacar el balón jugado, al pie, pero la presión de uno de los centrocampistas del Aberdeen robó el balón en tres cuartos de campo. Rápidamente abrió a banda izquierda para que el extremo pudiera encarar y meterse en el área por la banda, zafándose de todos sus marcadores. Este, ya en el área, levantó la cabeza y vio a Miles Storey, delantero y compañero de equipo entrando al segundo palo. Puso, por tanto, un centro raso en su dirección, paseándose por delante del portero y de la linea de gol. Storey solo tenía que empujar el esférico cuando pasó esto:
¿De verdad? ¿Cómo se puede fallar eso? Menos mal que su equipo finalmente se impuso por un gol a cero y no fue determinante esta jugada. Eso sí, seguro que Miles Storey no se olvidará jamás del increíble fallo que tuvo. ¿Imaginas si le pasara esto en la final de la Champions League y por eso no ganaran el encuentro? No lo queremos ni pensar...
